La urna con los restos del poesta Pablo Neruda fue extraída este lunes de la tumba donde fue enterrado junto a su tercera esposa, Matilde Urrutia, en la localidad de Isla Negra, en la costa central de Chile.

El procedimiento duró apenas una hora gracias a que el tiempo y las condiciones en que se llevaron a cabo los trabajos fueron mejores de lo que se esperaba y a que el féretro de Neruda, fallecido en 1973, estaba separado del de Urrutia, muerta en 1985.

Tras la rotura de la urna y el análisis con rayos equis, los restos fueron enviados a la sede en Santiago del Servicio Médico Legal (SML), informó el director de este organismo, Patricio Bustos.

Bustos explicó que lo más importante en los análisis será encontrar la presencia de tóxicos y se lamentó de no contar con fichas clínicas o biopsias, que, según dijo, "podrían haber ayudado a avanzar en el ámbito pericial y judicial".

Añadió que algunas muestras puede que sean enviadas al extranjero para su análisis, pues ya se han recibido ofertas desde Suiza, Canadá y Suecia.

Neruda (1904-1973) murió en una clínica de Santiago el 23 de septiembre de 1973, días después del golpe militar que encabezó Augusto Pinochet para derrocar al presidente Salvador Allende.

La exhumación fue ordenada por el juez Mario Carroza a raíz de una querella presentada en mayo de 2011 para esclarecer si murió a causa de un cáncer o asesinado con una inyección letal.

La querella la presentó el Partido Comunista (PC) de Chile, por medio del abogado Eduardo Contreras, después que Manuel Araya, que fue chofer de Neruda, asegurase en una entrevista que el ganador del Premio Nobel de Literatura 1971 había sido asesinado por agentes de la dictadura de Augusto Pinochet.

Testigos del procedimiento de hoy fueron el presidente del PC, Guillermo Teillier, Araya y algunos familiares del poeta y representantes de la Fundación Pablo Neruda, institución que rechazó la exhumación por considerar que el poeta murió de cáncer.