El Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad (Ceaaces) ayer dio los resultados de las revisiones realizadas a las universidades que se encontraban en categoría D.

Tras someterse al proceso de acreditación, dos se ubicaron en la categoría B y dos en la C. En noviembre se revisará la situación de otras 4 instituciones.

Las universidades de Guayaquil y de Machala están en la B, mientras que la Estatal del Sur de Manabí y la de Otavalo, en la C.

Según el presidente del Ceaaces, Francisco Cadena, en las cuatro instituciones evaluadas se mejoraron los niveles de investigación. “Cuando iniciamos la evaluación en 2013 estas entidades registraban cero en investigaciones y ahora ya hay publicaciones con rigor científico, porque no hemos permitido que cualquier artículo califique”.

La Universidad de Guayaquil  pasó de 0 a 400 publicaciones regionales; la de Machala, de 0 a 100; la de Manabí, de 3 a 60; y la de Otavalo, de 0 a 28.

La plantilla de docentes ha mejorado en las entidades

También hubo incremento del número de docentes con maestría en todas las instituciones. La Universidad de Guayaquil pasó de 37% a 90%; y la de Machala, de 6% a 93%.

De igual manera, la cantidad de profesores con PhD en la Universidad de Guayaquil subió de 6 a 80; y  en la de Machala, de 2 a 13.

“En este componente se advierten esfuerzos grandes de las instituciones por mejorar. El incremento es considerable pero, por el tamaño de la universidad, resulta una asignatura pendiente. Sabemos que no es fácil. Por eso se han enviado profesores a estudiar en el exterior, que pronto vendrán y permitirán mejorar su calificación en este aspecto”.

Los evaluadores indicaron que en el caso de la Universidad de Otavalo la línea de investigación es aún incipiente, aunque destacaron la infraestructura y su número de alumnos (350).

El gran déficit en la Universidad de Machala y en la de Guayaquil está en los estudiantes y en la academia; mientras que en la Estatal del Sur es la planificación.

Instituciones que deben acreditar

Las cuatro universidades que restan por acreditar son la Católica de Cuenca, Agraria del Ecuador, Luis Vargas Torres de Esmeraldas y la Laica Eloy Alfaro de Manabí.

Todos estos centros de estudios superiores recibirán la capacitación para proporcionar la información en noviembre y el próximo año tendrán la evaluación.

Las instituciones deben, al menos, completar un puntaje del 35% para aprobar la evaluación; pasado el 45% van a la categoría B, y si superan el 60%, están en la A.
“Todas deben acreditar para continuar en el sistema, el cual tiene que garantizar una educación de calidad para el país”.

Equidad de género es una tarea pendiente en los centros

Cadena indicó que, pese a que el número de estudiantes mujeres es mayor que el de varones en todas las instituciones de educación superior, aún no se logra una equidad de género en las áreas de dirección y en las de docencia. “Con un porcentaje de 30% en la dirección ya estarían cumpliendo con el estándar establecido en la norma”.

El funcionario aclaró que se está combinando equidad y calidad en la enseñanza. “Tenemos los mejores salarios de profesores en América Latina. En este país, un profesor que cumple con el reglamento del escalafón puede ganar tanto como un ministro de Estado”.

René Ramírez, secretario de la Senescyt, precisó que el mejoramiento de esas universidades demandó mayor inversión económica. El presupuesto de la U. de Manabí pasó  de $ 11 millones a $ 36 millones; el de la U. de Guayaquil, de $ 44 millones, a $ 183 millones;  y el de la U. Estatal del Sur de Manabí, de $ 2 millones a $ 12 millones. (I)

ATENCIÓN COMUNIDAD UNIVERSITARIA: El @ceaaces informó hace pocos minutos que nuestra Alma Mater se encuentra en la categoría "B". pic.twitter.com/KYVlHTJBlE

— Univer. de Guayaquil (@UdeGuayaquil) 19 de octubre de 2016