Plan Familia Ecuador es un proyecto que finalizaría en 2017, y surgió en reemplazo de la Estrategia Nacional Intersectorial de Planificación Familiar y Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENIPLA), por un decreto presidencial. Los desafíos son grandes para su directora Mónica Hernández, entre ellos promover el diálogo sobre sexualidad entre padres e hijos. Esta tarea se realiza desde abril. La doctora y quien fue boy scout, aseguró que hablar sobre la familia debe ser un proyecto institucionalizado. Adelantó que harán una nueva encuesta del estilo de vida de los adolescentes para conocer lo que piensan ahora.

¿Qué balance podría hacer sobre Plan Familia Ecuador?

Con el Ministerio de Educación hemos realizado acciones concretas, como revisar todos los textos escolares y sacar nuestras recomendaciones sobre el tema de familia y sexualidad. Ellos además tienen hace más de un año Educando en Familia, en el que daban información sobre los valores; ahora el siguiente módulo tiene que ver con afectividad y sexualidad. Con el Ministerio de Salud hemos formalizado en estas últimas semanas una consultoría que nos ayudará con los diálogos, además de actividades extramurales. Y con el Ministerio de Inclusión, por mandato del Presidente, vamos a llegar no solo a adolescentes hasta los 18 años sino de 18 a 22 años.

¿Cuántas escuelas y colegios se han visitado para hablar sobre la familia o cuántos encuentros se han cumplido?

Directamente no somos los que visitamos las escuelas o colegios, porque eso lo hace el Ministerio de Educación; lo que sí hemos hecho es trabajar con sus actores más cercanos. Hemos llegado a unas 700 personas, entre adolescentes, jóvenes y algunos adultos; de ellos, 10% son padres de familia; algo que fue interesante es la alianza con el Ministerio del Deporte. Hubo un encuentro con alrededor de 300 adolescentes que participaron en los juegos nacionales pre juveniles de Guayas. Ellos nos pidieron que les diéramos talleres.

¿Qué debates y análisis han surgido de esas reuniones?

Ha sido muy valioso, porque podemos rescatar de ellos y de otros de movimientos boy scout, que quienes dedican algo de su tiempo libre en un deporte o actividad artística van armando su proyecto de vida y van tomando una serie de decisiones que son mucho más pensadas y con más autocontrol, respecto a otros grupos poblaciones con los que hemos conversado. Con la academia también hay alianzas. Queremos que se hable de Plan Familia por todos lados.

¿Cuál ha sido el acercamiento con la academia?

El jueves participamos en un taller de la Red Universitaria de Investigación y Posgrado (RUIP), que engloba a 15 instituciones y el 25% de estudiantes a nivel nacional, cerca de 350.000. De ellas, 10 están comprometidas con Plan Familia. Con la Universidad de Guayaquil, la Universidad Técnica Particular de Loja y la Laica también hemos conversado.

¿De los diálogos con los padres, qué inquietudes han escuchado?

En noviembre empezaremos a reunirnos en Guayaquil y Quito con los padres para presentarles el Plan Familia. Estamos armando los contenidos. Tendremos talleres con asociaciones de agricultores, el sector informal y ligas barriales. (I)