En la jornada de protestas opositoras en Quito contra la aprobación de las 16 enmiendas constitucionales, el pasado 3 de diciembre, hubo un grupo perteneciente a la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB). Frente a estos actos, el Consejo de Educación Superior (CES) emitió un comunicado rechazando la convocatoria realizada por el exrector de ese centro de educación superior, Enrique Ayala Mora.

Mora convocó al personal administrativo y estudiantil a través de oficios. El CES enfatizó que la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES), en su disposición general cuarta establece que “las universidades y escuelas politécnicas son el centro de debate de tesis filosóficas, religiosas, políticas, sociales, económicas y de otra índole, expuestas de manera científica; por lo que la educación superior es incompatible con la imposición religiosa y con la propaganda proselitista y político partidista, dentro de los recintos educativos...”.

Enrique Santos, presidente subrogante del CES, informó que el fin de las universidades no es ser una plataforma política, sino un espacio de reflexión académica. Agregó que el CES entiende que los estudiantes salgan a protestar contra determinada situación. “Lo cuestionable es que se use la universidad como un espacio de proselitismo político”, dijo.

La estudiante Carolina Castro contó que la comunidad universitaria recibió un correo por parte del exrector, quien convocó a las personas que voluntariamente quieran participar en una marcha que salió desde ese centro de educación superior hacia la Asamblea Nacional.

Castro indicó que a pesar de que ella no se sumó a la protesta, pues sostiene que “a la universidad se va a estudiar”, cerca de 100 personas de la Andina sí participaron de la movilización. Miguel Terán fue uno de ellos, el estudiante de una maestría en Derecho sostuvo que “por décadas los estudiantes -de donde sea que fueren- hemos construido la historia de este país”. Santos recalcó que el comunicado fue suscrito por 5 miembros de ese organismo. (I)