Una oferta variada de alternativas tienen los turistas que llegan hasta la capital azuaya, para las fiestas de Fin de Año.

Las opciones incluyen la gastronomía local, la compra de artesanías o la participación en los distintos actos religiosos.

Según Fernando Paredes, director municipal de Turismo de Cuenca, esta es una época donde se reactiva el comercio, con la presencia de migrantes. También en la que el turismo religioso crece debido a los tradicionales Pases del Niño. “Las familias suelen realizar estas procesiones hasta el domingo de carnaval y eso ayuda mucho al turismo”, dijo.

El funcionario mencionó que en los últimos años aumentó el arribo de personas que se fueron a Estados Unidos o España para trabajar.

Este feriado de cuatro días es visto con expectativa por el sector hotelero. Los dirigentes consideran que es una fiesta familiar y eso disminuye un poco la presencia de foráneos.

Ante ello los sitios de alojamiento ofrecen hasta el 40% de descuento para quienes requieran de habitaciones.

El presidente del gremio, Juan Pablo Vanegas, dijo que no existe mucha demanda, pero aspiran a que los visitantes lleguen. Destacó que la ciudad tiene distintos programas para los últimos días del año.   

Citó, por ejemplo, el concurso de ‘años viejos’ organizado por la Unión de Periodistas del Azuay (UPA) y el Amistad Club, en el que se entregarán $10 mil en premios.

En la terminal terrestre, hasta ayer, no se observó una masiva presencia de personas que busquen pasajes para otras ciudades o balnearios.