En la provincia del Cañar hay un faltante de aproximadamente 150 efectivos policiales para garantizar la seguridad en los siete cantones.

El capitán Daniel Ramírez, jefe de las Unidades de Policía Comunitaria (UPC) y la  Dirección Nacional para el Niño y el Adolescente en Ecuador (Dinapen), manifestó que hace algunas semanas pidió ayuda a la gobernadora,  Bertha Molina, para superar esta falencia.

El oficial indicó que al momento solo cuentan con 450 agentes distribuidos en cantones, parroquias y comunidades, pero no son suficientes para enfrentar a la delincuencia.

La representante del Ejecutivo se comprometió a efectuar las gestiones necesarias para solventar este déficit de personal y se espera que a finales de este año lleguen por lo menos 100 policías. “Según los sondeos que hemos realizado con la Unidad de Investigaciones, el déficit policial dificulta el trabajo por falta de apoyo”, expresó Ramírez.

En otro tema, a través de la Dirección Nacional de la Policía Comunitaria se implementó el plan para la construcción de UPC a nivel nacional.

Para la provincia del Cañar, en el primer semestre de 2012 se ha planificado la construcción de dos unidades, una en El Tambo y otra en Biblián, las cuales tienen un avance del 95% y 8%, respectivamente.