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El Telégrafo
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Progenitores exigen que se elija a un docente de la institución como rector

Padres del Benalcázar denuncian deterioro del colegio quiteño

Los padres de familia fueron impedidos, en principio, de ingresar al colegio para mantener una reunión.
Los padres de familia fueron impedidos, en principio, de ingresar al colegio para mantener una reunión.
Foto: Miguel Jiménez/ El Telégrafo
07 de abril de 2016 - 00:00 - Redacción Quito

La designación de un rector (e) entre los docentes del plantel; la convocatoria a un concurso de méritos y oposición entre la plantilla de maestros y la garantía de estabilidad de autoridades y profesores.

Estas son las exigencias de los padres de familia de la Unidad Educativa Municipal Sebastián de Benalcázar a la Alcaldía de Quito. Unas 40 personas realizaron un plantón ayer frente a la institución.

Según los padres, la posición de la institución educativa como referente de la ciudad y del país se ha perdido. Raúl Claudio recordó que desde 1999 hubo 7 rectores, entre titulares y encargados, con un promedio de duración en el cargo de 2 años aproximadamente.

Según los padres, aunque la situación de inestabilidad data de hace varios meses se ha agudizado desde 2014. Alodia Borja, presidenta de la Asociación de Padres de Familia, señaló como ejemplo que en las últimas 2 semanas hubo 3 encargados.

Borja responsabilizó de estos cambios a Camila Lanusse, quien es parte del grupo cercano a Mauricio Rodas desde la transición de la Alcaldía, y con quien se habría reunido la semana anterior.

David Arias, uno de los manifestantes, indicó que las constantes modificaciones no ocurren únicamente en el rectorado, sino también a nivel de otras autoridades, como inspectores, incluso en la plantilla de maestros. “Esto afecta en la educación de nuestros hijos. Tienen clases con un maestro y de pronto los cambian a otro curso, sección o simplemente se va. A veces, incluso,  carecen de profesores”, apuntó.

Esto, según Arias, tiene efectos visibles en la unidad educativa. Y  mencionó que mientras en 2014, el colegio colocó 28 estudiantes en el Grupo de Alto Rendimiento (GAR) de las pruebas de ingreso a las universidades, el año pasado fueron 8.

Constante tensión

El traspaso del gobierno capitalino de Augusto Barrera a Mauricio Rodas produjo fricciones. La primera tuvo lugar con la supresión del proyecto de trasladar el plantel al extremo norte del Parque Bicentenario (antiguo aeropuerto).

El entonces secretario metropolitano de Educación, Juan Pablo Bustamante, informó en octubre de 2014 que el colegio permanecería en su ubicación del centro-norte. Esto generó molestias pues con el cambio del colegio en unidad educativa (con todos los niveles de instrucción), se considera que el actual predio es insuficiente.

Borja apuntó ayer que el plantel carece, por ejemplo, de juegos y material didáctico para los estudiantes pequeños.

Raúl Gordón, rector (e) al momento del anuncio, se refirió ayer a la desazón que generó la noticia entre los integrantes de la institución.

Para los padres de familia, esa sería la razón de que se lo reemplazara por Ángel Ramón Flores. Arias señaló que Bustamante habría dicho que necesitaba un rector de su entera confianza.

A inicios de 2015, la secretaría impidió la posesión de la directiva de la Asociación de Estudiantes elegida en noviembre de 2014. Las autoridades municipales argumentaron supuestos problemas en los comicios. Pero la candidata ganadora, Jahiren Noriega, atribuyó el hecho a declaraciones que dio a favor del proyecto de reubicación. (I)

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