El grupo G77+China, que preside Ecuador, logró un acuerdo en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP-23), en cumplir con los financiamiento de los Estados ricos a los que se encuentran en desarrollo para hacer frente al calentamiento del planeta.

Tras dos semanas de gestiones, la cumbre efectuada en Bonn (Alemania) culminó con la decisión de avanzar en las negociaciones del programa para la implementación del Acuerdo de París.

El compromiso fue acompañado de un reconocimiento de que el incremento de la acción y el apoyo para los países en desarrollo con financiamiento, transferencia de tecnología y construcción de capacidades a 2020 es la base para implementar el Acuerdo de París en ese año.

Las negociaciones finalizaron con el acuerdo de que el Fondo de Adaptación, que ya existe bajo el Protocolo de Kioto, también servirá para financiar la implementación del Acuerdo de París.

Este fondo constituye una de las fuentes más directas y asequibles para que los países en desarrollo financien sus proyectos de adaptación.

En la Conferencia sobre Cambio Climático (COP23), la canciller de Ecuador, María Fernanda Espinosa, presentó la posición de los países en desarrollo ante una plenaria en la que resaltó la necesidad de avanzar ante el cambio climático, una de las amenazas globales más graves contra las generaciones presentes y futuras.

Sobre el financiamiento, transferencia de tecnología y desarrollo de capacidades, señaló que es necesario un nuevo objetivo, a partir de la base insuficiente de $ 100.000 millones anuales previstos por el Fondo Verde Climático creado en 2009, para reducir las emisiones y la adaptación al cambio climático. Al momento se cuenta con $ 6.000 millones.

El grupo que preside Ecuador valoró los avances en agricultura, el desarrollo de capacidades, género, educación, la participación y acceso a la información pública; la construcción de métricas comunes y otras demandas de los países en desarrollo.

La cumbre sirvió también para presentar la iniciativa amazónica. (I)