El Gobierno de Bolivia anunció ayer el cierre de parte de la frontera con Perú a raíz del conflicto en la zona cocalera de Apolo, en el norte de La Paz, donde el fin de semana murieron un militar y un policía en un ataque a tiros en el que supuestamente actuaron narcotraficantes peruanos.

El ministro de Gobierno (Interior), Carlos Romero, señaló ayer en rueda de prensa que se establecerá un perímetro en el lugar del conflicto y se sobrevolará la zona porque presumiblemente hay gente peruana y hay que evitar que huya. “Hemos pedido que se cierren esas fronteras y, además, que haya un dispositivo policial también del Perú para que se cierren esos accesos y esas vías”, dijo Romero.

El conflicto se desató el sábado, cuando la llamada Fuerza de Tarea Conjunta, conformada por militares y policías, ingresó a Apolo, 450 kilómetros al norte de La Paz, para iniciar la destrucción de plantaciones ilegales de coca en esa zona.

Según las autoridades, los agentes fueron emboscados por campesinos y supuestos extranjeros vinculados con el narcotráfico que les dispararon e incluso tomaron seis rehenes. (EFE)