Patricia Estupiñán, directora general de revista Vistazo, criticó en una entrevista que le hizo María Josefa Coronel, de Teleamazonas, la multa de 80 mil dólares que le impuso el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) al medio por  supuestamente haber violado el sigilo electoral en la Consulta Popular de mayo de 2011.

Ese medio de comunicación publicó el editorial “Un NO rotundo”, en el que se instaba a los lectores a votar por el No en cuatro preguntas.

En el diálogo con Teleamazonas, Estupiñán citó el editorial de Sebastián Vallejo publicado en El Telégrafo el 6 de mayo de 2011. Allí el articulista reflexionaba sobre su postura y su voto en la Consulta Popular.

“Vistazo ha sido sancionada por supuestamente violar el sigilo electoral, como lo llaman, porque la edición de Vistazo circuló el jueves 5 de mayo del 2011. Sin embargo, y yo defiendo el derecho de estas personas, en diario El Telégrafo el jueves 5 y el viernes 6 hay artículos que opinan ampliamente a favor de la consulta (...) El día viernes 6 Sebastián Vallejo dice ‘Mi voto, mi justificación. Pero el mío no será un voto en plancha. Según el Gobierno, no sólo le daré 9 veces sí a la Patria. Y aquí, el jueves 5 dice Nadie que pretenda llamarse de izquierda, o al menos que respete la heroica figura de Alfaro, podría estar en contra del ente regulador de la prensa. De igual manera, nadie debería oponerse a la penalización para que los empresarios no afilien al IESS y, finalmente, nadie podría siquiera poner en duda la imperiosa necesidad de transformar una oprobiosa administracion de justicia’. Es decir que cuando se invita a votar por el Sí, es opinión política. Cuando se invita a votar por el No en 4 preguntas, es propaganda”, dijo Estupiñán al referirse a la multa y a extractos sacados de contexto de editorialistas de El Telégrafo.

La última cita que leyó no pertenece a Sebastián Vallejo sino a Fabrizio Reyes de Luca, quien se refería a la oposición que recibió Eloy Alfaro por los medios de información de su época. A continuación, la cita completa: “Nadie que pretenda llamarse de izquierda, o al menos que respete la heroica figura del general Alfaro, podría estar en contra de un ente regulador de la prensa, sin censura previa y con responsabilidad ulterior por la información difundida o publicada.

“De igual manera, nadie debería oponerse a la penalización para los empresarios que no afilien al Instituto de Seguridad Social a sus trabajadores; nadie podría jactarse de su posición socialista sin estar de acuerdo con el control del enriquecimiento privado ilegal. Finalmente, nadie podría siquiera poner en duda la imperiosa necesidad de transformar una oprobiosa administración de justicia. En consecuencia, pienso que ha llegado el momento de meditar convenientemente hacia dónde vamos como nación. Cabe reflexionar sobre lo siguiente: Seguimos por la senda del cambio o nos detenemos y damos marcha atrás a lo que éramos antes”.

De igual modo, el abogado de Fundamedios, Santiago Guardera  pregona por todos los medios que le invitan, que a El Telégrafo nadie lo lee. Por lo visto, solo él lo hace, pues está pendiente de todo lo que se publica en este rotativo público. Ayer, faltaba más, en radio Visión, en el programa de Diego Oquendo, volvió a atacar a este matutino aludiendo que hay “doble rasero”, pues según él nuestro editorial principal llamó a votar por el Sí. Lo cual es un patraña. Y de paso, Oquendo, usando los argumentos de Vistazo nos señaló sobre la base de una mentira.