Hasta este martes 25 de diciembre coincide el período de oleaje y aguaje que se evidencia en el perfil costero con perjuicios en balnearios de cuatro provincias, lo que motivó a la Secretaría de Gestión de Riesgos a declarar la alerta amarilla y ubicar en los balnearios banderas rojas y amarillas en señal de riesgo.

Las playas más afectadas son: Tonchigüe, Súa, Las Peñas, Limones, y Camarones (Esmeraldas); Crucita (Manabí); Salinas (Santa Elena); y Jambelí (El Oro).

El mar ocasionó daños en malecones, arrastró embarcaciones y construcciones que dejaron damnificados. Aún no hay un balance oficial de los daños.

La Armada indicó en un escueto comunicado que se busca una persona ahogada en Same (Esmeraldas).

Sobre los eventos que acontecen en el mar, el Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar) explicó que la suma de un aguaje máximo (incremento del nivel del mar superior a la usual) y la llegada de trenes de olas con mayor energía (períodos mayores a 18 segundos) provoca una serie de afectaciones.

“Las olas rompen con más energía en las costas ocasionando desbordamientos en los malecones, daños con estructuras cercanas al mar, incremento de procesos de erosión y sedimentación, generación de corrientes de resaca, entre otros eventos”.

El oleaje, que se presenta desde el sábado en las zonas norte y centro del perfil costero y en las del norte y oeste de la región Insular, finaliza este martes. Desde mañana se prevé que la altura de las olas, de 4 metros según reportes de habitantes en los sitios afectados, disminuyan ligeramente, Sin embargo, aumentarían en la costa sur por el predominio de oleajes.

El aguaje máximo se registra desde el domingo con un incremento del nivel del mar superior al usual durante las pleamares y será hasta mañana.

Con esas condiciones, en la zona costera se mantendrá un estado de mar de entre ligeramente agitado y agitado, con alturas máximas desde 1.2 a 1.7 m.

Lo que se presentan son aguajes o mareas de Sicigia que ocurren de forma cíclica, cada 14 días, por la atracción gravitacional del Sol y la Luna sobre la Tierra en las fases de luna llena y luna nueva. Esto hace que el nivel del mar ascienda más de lo normal en la pleamar y descienda por debajo de lo normal en la bajamar.

“Los aguajes máximos se producen cuando coincide una fase de luna llena o luna nueva con el Perigeo lunar, es decir cuando la Luna se encuentra más cerca de la Tierra en su trayectoria elíptica”.

El Inocar anunció que mañana, aunque arribarán trenes de olas con períodos menores a 18 segundos, se mantendrá la precaución por la influencia de los oleajes que llegan del sur y del norte, y por el aguaje.

Hasta este lunes, personal de las instituciones involucradas con el tema realizaban controles y tareas de limpieza de lo que dejó la fuerza de las olas. (I)