En el Teatro Centro de Arte se realizará hoy Vive el Arte 2013, un encuentro entre dos disciplinas artísticas que irán de lo clásico a lo contemporáneo, de lo internacional a lo latinoamericano y regional.  

Este evento, organizado por Ana María Vargas, pianista con más de 15 años de experiencia, busca precisamente darle claves a la audiencia sobre distintas formas de hacer arte, desde la danza y la música.

El concierto y repertorio de baile, que se realizará a las 20:30, contará con la participación de los fundadores  del Ballet del Teatro Centro de Arte de la  Fundación  Sociedad Femenina de Cultura. Ellos son  los cubanos Margit Peguero Vargas y Daet Rodríguez Díaz, esposos, quienes desde 2001 dirigen su propia academia de danza radicada en Guayaquil, llamada Cuballet.

Ambos, graduados en la Escuela Nacional de Arte en La Habana, Cuba, interpretarán un fragmento de la obra de ballet La file mal gardée, del repertorio del Royal Ballet de Londres, creada en 1789, por Frederick Ahston, con música de Hérold-Lanchbery. “Es una pantomima desorbitante”, afirma Peguero. La obra implica actuación y ballet, por lo que requiere mucha habilidad y concentración, explica Rodríguez.

La file mal gardée trata sobre dos amantes contrariados, Lissete (Margit) y Colín (Daet), que por su clase social no pueden consumar su amor. La madre de la joven no quiere que se junte con Colín, puesto que él es un campesino pobre. “Como ella -la madre- es ambiciosa, quiere casar a Lissete con el hijo tonto de un terrateniente rico, pero a ella no le gusta”, cuenta Rodríguez.

La obra mantiene un tono cómico e inocente, y  su nombre se basa en una escena del montaje en la que la madre de Lissete la encierra en un cuarto donde está guardada la comida de los pájaros. Sin embargo, su esfuerzo fue en vano, pues se halla escondido Colín; luego los encuentran besándose, por lo que “no queda de otra, deben casarse”, agrega Margit.

La file mal gardée no será interpretada en su totalidad esta vez, no obstante Cuballet está preparando el repertorio completo para los próximos meses. “La idea también es hacer fragmentos de obras de ballet ‘grandes’ para que en la ciudad se conozca un poco de cada clásico y cuando llegue el momento de ver las  íntegras, ya sepan de qué van y puedan apreciarlas mejor”, argumenta Peguero.

Además, el cuerpo de baile de Cuballet acompañará a Margit Peguero en la coreografía de estilo lírico contemporáneo, musicalizada con la canción Someone like you, de Adele. Con este repertorio, Peguero ganó el premio a la excelencia Jorge Tomín y también mereció la medalla de oro del concurso Danzamérica, en Córdoba, Argentina.

Las alumnas de la academia bailarán también una coreografía de tipo lírico, con I don’t want to miss a thing, de Aerosmith.

Por el lado del repertorio musical que se presentará en Vive el Arte, Ana María Vargas interpretará en piano una selección de compositores universales que incluyen a Chopin, Schubert y Tchaikovsky. Además presentará el pasillo ecuatoriano El Espanta Pájaros.

Pero Ana María no será la única sobre el escenario, también estará el chileno Ernesto Guerra, conocido como “El Arpa de América”, quien presentará Camino de Luna, de un músico de Chile llamado Luis Aguirre Pinto. También Pájaro Campana de Félix Pérez Cardozo. Juntos interpretarán un camamé, ritmo del folclore argentino llamado Merceditas, de Ramón Sixto Ríos.  

El guitarrista guayaquileño Juan Antonio Flor, graduado de la EMBA (Escuela de Música de Buenos Aires),  brindará un repertorio de valses venezolanos de Antonio Lauro. A esto le suma las canciones de blues y jazz que tocará, entre estas Stella by Starlight, considerado uno de los mejores standars, escrito por Victor Young, en 1944.

Además, junto con Ana María Vargas, interpretará temas de Vinicio de Moraes, del ritmo choro, típico de Brasil. “Aunque choro significa llanto y lloro, realmente es un ritmo movido y se necesita mucho conocimiento del instrumento (guitarra) por su virtuosidad”, explica Vargas.

De acuerdo con la pianista, “en la ciudad hay muy poco acercamiento a este tipo de música clásica o no se sabe qué hay en Latinoamérica por completo”, por eso, agrega, con este evento intenta vincular a la comunidad con toda la gama de posibilidades que existe  en el mundo de la música.