La Velada por el Yasuní tuvo su espacio en Guayaquil. Esta actividad, que se realizó simultáneamente en Quito, Cuenca, Manta, Coca y Loja, con el objetivo de buscar opciones para proteger la naturaleza, congregó a representantes de diversas agrupaciones ambientalistas.

El punto de encuentro fue el café Olalá, situado en la avenida Víctor Emilio Estrada y Dátiles (Urdesa Central). A partir de las 18:00, los activistas por el medio ambiente empezaron a llegar con pancartas, velas y guitarras. Algunos tenían el rostro con pintura. El objetivo: proponer ideas sobre actividades de más envergadura que les permitan dar a conocer sus pensamientos a un mayor número de personas.

En el local se reunieron agrupaciones como Amigos del Estero Salado, Guardianes del Yasuní, Ogar Ambiental, Cerros Vivos, Resistencia Ecuador, así como estudiantes de universidades. Mónica Teresa Solano, de Amigos del Estero, explicó que “la idea fue hacer un conversatorio para que la gente tenga una noción sobre el tema ambiental, qué está pasando en la Amazonía”.

La reunión sirvió para desarrollar una lluvia de ideas. Entre ellas se destacó reforzar el trabajo con los niñosSegún la activista, quien lleva más de tres años liderando iniciativas para la recuperación del estero, “hemos tenido  una lluvia de ideas. Muchos están de acuerdo en que se debe informar a los niños. Por ejemplo, hacer animaciones sobre las culturas ancestrales. Así, desde pequeños se les puede inculcar el amor por la naturaleza”.

Sobre el tema del Yasuní ITT, Solano considera importante que los guayaquileños se unan en un gran evento “para que nos escuchen”.

Para Gabriel Jiménez, de Resistencia Ecuador, “el objetivo es generar ideas para desarrollar oportunidades a partir de los colectivos y personas involucradas con el medio ambiente; generar alternativas al modelo de desarrollo operante, que permitan respetar los derechos humanos y preservar el ambiente”.

Según él, una preocupación generalizada en toda la sociedad es lo que decida el Gobierno sobre si se explotará o no el  Yasuní. “Hay que buscar opciones que no afecten a los pueblos que viven ahí”.

Al finalizar la reunión, quedaron sentadas las bases para la realización de un megaevento, que será anunciado en los próximos días. Para los activistas del grupo Naturaleza Viva, “fue muy gratificante ver cómo los jóvenes universitarios daban sus puntos de vista sobre la explotación de petróleo en la Amazonía ecuatoriana”.