Publicidad

Ecuador, 19 de Marzo de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

“Logramos legitimar el dolor de las víctimas”

“Logramos legitimar el dolor de las víctimas”
12 de febrero de 2014 - 00:00

El más reciente caso de pedofilia conocido es el del nuncio apostólico de República Dominicana, Josef Wesolowski. El sacerdote polaco, de 65 años, pagaba por tener relaciones sexuales con menores. El Vaticano destituyó a Wesolowski luego de una investigación, pero el cura aún reside en la Santa Sede. Este fue uno de los hechos mencionados por los 18 expertos del Comité de Derechos del Niño de la ONU (Organización Mundial de las Naciones Unidas) cuando mantuvieron el diálogo con voceros del Vaticano. “Les evidenciamos que curas como él no han sido juzgados”, dice Sara Oviedo, una de las dos relatoras a cargo del informe de la ONU. En el documento la Comisión sostiene que el Vaticano, signatario de la Convención de los Derechos del Niño en 1990, nunca ha reconocido con amplitud los crímenes de abusos sexual contra menores por parte de sacerdotes.

¿Acusa directamente la ONU al Vaticano de violar la Convención de los Derechos del Niño?
No tanto al Vaticano sino a centenas de curas a nivel mundial que han abusado sexualmente de niños o niñas. Nos correspondió hacer el examen o diálogo, igual que sucede en cualquier otro país miembro de la Convención, y hemos hablado con la Santa Sede de todo lo que compete a los derechos de los niños.

¿Pero el Vaticano responde por los curas, son sus ciudadanos?
No estamos acusando a la Santa Sede por los crímenes cometidos, sino que le estamos diciendo que deben dar información y entregar a la justicia a estos curas. Los acusamos de porqué se tomaban decisiones de cambiar de parroquia a curas pederastas, cuando lo único que cabía en un criminal era llevarlo a la autoridad competente. Les estamos diciendo que no han cumplido con informar de todos los casos de pedofilia a nivel mundial, quisiéramos saber cuántos son exactamente, el único que podría darnos esos datos es la Iglesia porque los han estado registrando desde 2006. Además, les estamos diciendo “ustedes no han hecho la suficiente capacitación sobre derechos humanos y de los niños a sus sacerdotes”.

¿Qué impacto o eco tendrá el informe en la sociedad?
Nuestro informe, desgraciadamente, no es vinculante, pero ha tenido tal eco a nivel mundial que estamos hablando de esto casi a 8 días de dar a conocer las recomendaciones.

Confío en que en los días siguientes se conforme la Comisión en el Vaticano, y esta se encargue de los hechos, y puedan lograr que la Iglesia se mueva y haga las cosas que la ONU solicita. Pero lo más concreto e importante es que logramos legitimar el dolor de las víctimas. Se les dio cabida y se les dijo “ustedes tienen la razón, sí tuvieron un problema”. Se logró en algo resarcir su dolor. Más que visualizar, se legitimó también el problema de la pedofilia de los curas en el mundo, ya no es solo una cuestión sensacionalista de la prensa, sino que la ONU le dio un carácter de verdad.

¿Tienen los curas un halo de pureza o de intocables, lo que provoca que no se les crea a las víctimas?
Exactamente, resulta muy difícil creer a una víctima frente a un cura. Es uno de los hechos más dolorosos porque han sido abusados por alguien a quien consideran una autoridad espiritual. Fuera de esto no les creen y les dicen que callen, es muy difícil para un niño vivir así.

¿Quién fue el mayor encubridor de casos de pederastia, el Papa Juan Pablo II o Benedicto XVI?
Las denuncias comienzan a inicios del 80, entiendo que estaba Juan Pablo, luego él al igual que el Papa Benedicto piden un perdón mundial a las víctimas, pero no hacen nada en la práctica, queda todo en palabras. Pienso que los hechos fueron ocurriendo así y la gente verá quién es más culpable. Todo aquel que deja hacer y deja pasar las cosas es igual de responsable que el otro.

¿Ha ido la ONU más allá de sus límites y ha escuchado más a ONG tal cual dijo el portavoz Federico Lombardi?
Las reuniones con las organizaciones civiles se hicieron 6 meses antes del diálogo con el Vaticano, lo que tenemos son las dos fuentes del hecho. El día del diálogo se evidenció mucha insistencia de la Santa Sede sobre las cosas que supuestamente estaban haciendo. Ellos decían que ya no trasladan a los curas pederastas y dicen que los están sacando de su ejercicio. En ese mismo instante preguntábamos los casos concretos, y en ningún momento nos podían dar pruebas. Nos decían que sí estaban entregando los curas a las autoridades, les preguntábamos dónde estaban los datos con nombres y apellidos, pero no nos contestaban. No pueden decir que lo que hemos dicho es mentira. Hemos sido duros, a la larga es eso.

¿Qué posibilidad tiene el actual Papa de castigar a los responsables?
Creo que el actual Papa tiene mucha voluntad de cambio y amplitud para conocer y querer actuar en estos procesos. Lo que se requiere es voluntad política para entregar a la justicia a los pederastas, castigarlos como tal no puede pero sí puede recomendar a los obispos que entregue los nombres de los culpables. Eso sería un baño de verdad e iniciaríamos un proceso, más allá de la Iglesia, para condenar el abuso sexual en todos los espacios, en especial en la familia, que es donde más ocurren.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media