La mayoría de los británicos considera que la religión hace más daño que bien al mundo, en tanto que menos de un 25% de la población cree que la fe es una fuerza de bien para la humanidad, de acuerdo a un estudio dado a conocer en Gran Bretaña.

El informe, elaborado por la consultora Survation, concluyó además que incluso entre los británicos religiosos el 20% afirma que la religión es nociva para la sociedad. El estudio destaca que uno de 8 británicos se considera ‘muy religioso’, mientras que el 60% admitió no ser religioso en absoluto.

Para la mayoría de los consultados, el 55%, ser religioso “no hace que una persona sea mejor”.

Una de cada 8 personas entrevistadas sostuvo que los ateos suelen ser personas con más moral, comparado con solo el 6% que consideró que los ateos son ‘amorales’.

Del total de 2.004 británicos consultados, el 56% se describió como cristiano, el 2,5%  como musulmán, y el 1% como judío. El resto se declaró seguidor de otro credo o de ninguno.

El estudio de Survation concluyó además que los jóvenes son los que tienen la visión más positiva de la religión. El 30% de los británicos de entre 18 y 24 años cree que la religión ‘hace más bien que mal’, comparado con solo el 19% de aquellos entre 55 y 64 años que dio esa misma respuesta.

Linda Woodhead, profesora de sociología y religión de la Universidad de Lancaster, en Inglaterra, afirmó que la tendencia muestra que en Gran Bretaña crece la desilusión con las religiones institucionalizadas en particular.

“Lo que estamos viendo no es un rechazo completo a la fe, a creer en lo divino o en lo espiritual, aunque hay algo de eso. El rechazo se da más bien contra las religiones institucionales conocidas por la gente”, agregó.

Por su parte, Andrew Copson, director ejecutivo de la Asociación Humanista británica, afirmó que el estudio “confirma lo que ya sabíamos es el sentido común del británico de hoy día: que ser una persona religiosa tiene muy poco que ver con cuan moral seas”.

El informe se dio a conocer un día después de que el príncipe Carlos de Inglaterra, heredero a la Corona británica, emitió un inusual mensaje de video, en el que habló sobre religión y respeto.

En ese mensaje, que ha causado reacciones, el príncipe exhortó a los líderes musulmanes a poner fin a la persecución de cristianos en Medio Oriente.