Un esquema de socialización durante el proceso de construcción del tranvía y un plan de capacitación para que la ciudadanía sepa cómo usar el nuevo sistema, son los temas en los que trabaja el Municipio de Cuenca, para evitar inconvenientes en la ejecución de esta obra.

El primero será con los dueños y arrendatarios de los predios por donde recorrerá este medio de transporte, pues el trayecto ha sido uno de los aspectos más cuestionados tanto por la administración actual, como por la ciudadanía.

Por este motivo dijo Gerard Fernández, secretario de Movilidad del Municipio (foto), que en los siguientes días planean empezar a difundir un discurso corporativo sobre el tranvía. “Vamos a idear una técnica que inhiba el mal rato de no haberles explicado a tiempo y potencien la realidad del proyecto”, explicó.

Agregó que se colocarán 3 puntos de información del proyecto: en la plaza Cívica, oficinas de atención de Etapa (Gran Colombia y Tarqui) y en la estación de trasferencia del Arenal.

En el primero de los sitios empezó a colocarse la misma estructura que sirvió para el centro de interpretación que fue utilizado en meses atrás en la Plaza del Otorongo.

En estos espacios, afirmó Fernández, se entregará a la ciudadanía información general del proyecto. “Los temas particulares con los moradores de cada lugar son diferentes”, acotó.

“Que quede claro que no hemos abandonado el tema, estamos manejando con la respectiva discreción para no generar un tumulto. Estamos pretendiendo atender el problema de la gente sobre una obra que se va a ejecutar”, explicó.  

Durante el año anterior los miembros de la Veeduría al Sistema Integrado de Transporte de Cuenca, que fue conformada por el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), en un informe plantearon la necesidad de ampliar la socialización de esta iniciativa tanto con los propietarios como con las personas que arriendan en las zonas por donde transitará el nuevo sistema.

Hace unos días, los moradores y dueños de los locales comerciales de la calle Gran Colombia protestaron con la quema de llantas por el cierre de esta vía en su parte final, aparentemente por el inicio de las obras.

Los comerciantes y vecinos cuestionaron el comienzo de los trabajos argumentando que no se efectuó ningún tipo de socialización sobre el proyecto.