Pese a los a los impactos ambientales negativos que ha sufrido por su inadecuado uso y manejo, el humedal La Tembladera aún se presta para realizar diferentes actividades recreativas.

Este sector turístico se encuentra ubicado en la parroquia Jumón, perteneciente al cantón Santa Rosa en la provincia de El Oro.

Las Secretarías de Desarrollo Productivo y Gestión Ambiental del Gobierno Autónomo Descentralizado Provincial construyen actualmente un muelle en el humedal para repotenciar el desarrollo turístico del lugar, así como para que los nativos del lugar tengan un sustento económico sobre la base de estos recursos. El muelle será inaugurado el próximo mes de agosto.

Al cruzar la vieja vía Santa Rosa–Arenillas ya se puede divisar la laguna, allí, un letrero blanco con azul, junto al verdor de las plantas, da la bienvenida a los visitantes.
Alcides Fernández es nativo de la zona y conocedor de la laguna, él considera que está “encantada”, “porque se escuchan murmullos, cantos de gallos, campanadas, como que existiera en el fondo de la poza una ciudad. Luces que salen desde la profundidad del agua”, comenta, mientras su mirada se fija en la laguna que es admirada por muchos de los visitantes que llegan al sitio.

De acuerdo con la página oficial de la Convención Ramsar, los sitios que se incluyen en la lista como Humedales de Importancia Internacional son pantanos y marismas, lagos y ríos, pastizales húmedos y oasis, estuarios, deltas y bajos de marea, zonas marinas próximas a las costas, manglares y arrecifes de coral, así como sitios artificiales como estanques piscícolas, arrozales, embalses y salinas.

En Ecuador actualmente existen 18 sitios catalogados como humedales Ramsar por cumplir con las características que mantienen estos lugares, entre ellos está La Tembladera, por lo cual se busca que el sitio sea uno de los espacios turísticos más representativos en El Oro.

Justamente la escritora Leonor Bravo Velásquez rescata todas estas historias en su libro Los Secretos del Humedal, publicado en 2013, un año después de que el Ministerio del Ambiente declarara a La Tembladera como Humedal de Importancia Internacional Ramsar.

Durante un recorrido por el lugar, las historias de la laguna iban surgiendo en la voz de don Alcides: “La Tembladera ha tenido siglos de existencia. Las historias que se han dicho de la laguna, algunas son ciertas y otras son pura fantasía, así comentaban mis abuelos”, dijo.

No se tiene datos precisos sobre el origen del nombre, pero los comuneros adultos comentan que en una parte de la laguna, en un camino que utilizaban los ancestros para llegar a Santa Rosa, conocido como Las Cabuyas, “salían fantasmas en las noches, y el que pasaba por esa zona, hasta el más valiente temblaba”.

Un muelle que incentivará el turismo

La construcción del muelle de madera se gestiona desde abril de 2015, por parte de la Asociación de Productores Agroartesanales La Tembladera (Asogrotem), integrada por 51 socios y 43 familias. Nayla Quintana es quien lidera Asogrotem ante la institución de desarrollo provincial que ahora se cristalizó con la asignación de fondos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) del Ministerio del Ambiente.

El muelle servirá como zona de embarque y desembarque para quienes realizan paseos en bote o practican canotaje, pesca, fotografía, avistamiento de la flora y fauna del lugar o para quienes realizan turismo académico o de investigación.

La obra se complementa con 120 metros de adoquín ecológico, 2 chimeneas al aire libre construidas con ladrillos, con bancas de madera, 2 columpios de madera para la recreación de los niños que visiten el lugar, e incluso se puede degustar las especies capturadas, tales como, la llamada vieja azul y el chame.

El sitio, además de incrementar el turismo, servirá para realizar trabajos de reproducción de peces como el chalaco y la vieja azul, con fines de conservación y comercialización de la especie, como apoyo para los habitantes de las comunas ribereñas del sitio La Tembladera.

Esteban Quirola, prefecto de El Oro, dijo que es un trabajo coordinado entre las Secretarías de Desarrollo Productivo y Gestión Ambiental. El funcionario explicó que en la laguna predomina el lechuguín, especie vegetal que cubre el 75% del cuerpo de agua y también la totora que antiguamente era utilizada para la construcción de viviendas y cubiertas de las casas. (I)