El intendente general de Policía de Cotopaxi, Mario Sandoval, con la colaboración de las Fuerzas Armadas, se deshizo de alrededor de 1.600 litros de licor de fabricación artesanal.

El popularmente denominado ‘puro’, decomisado en varios operativos de control, fue vertido en tanques de almacenamiento para su posterior incineración en Novacero. “Este licor no tiene ningún registro sanitario y causa mucha molestia, incluso muertes en la colectividad de Cotopaxi”, dijo la autoridad.

De esta manera, el Intendente hizo un llamado de atención para que los ciudadanos eviten el consumo de este tipo de bebidas alcohólicas. “En este caso, los decomisos se efectuaron durante los últimos 3 meses. Hay todavía gente inescrupulosa a la que no le interesa la salud de los demás, que aún expende este tipo de bebida que no tiene ningún tipo de tratamiento”, acotó Sandoval.

Los operativos de control continuarán en la provincia de Cotopaxi, especialmente en el cantón La Maná, que es de donde proviene esta bebida.

En julio de 2011, el Ministerio de Salud Pública declaró ley seca y el estado de excepción a nivel nacional, por causa de las víctimas del licor adulterado con metanol.

En esa fecha, según los registros oficiales, se declararon 22 muertos y 105 hospitalizados en diversas provincias como Los Ríos, Tungurahua y Chimborazo, entre otras.

Un cuarto de taza (60 cm³) es suficiente para matar a una persona. Entre los síntomas están dolor de cabeza, de abdomen y dificultades visuales.