Las dependencias estatales serán reubicadas y concentradas en seis zonas del sur, centro y norte de Quito, para optimizar recursos, a partir del próximo año.

El propósito de las denominadas plataformas gubernamentales es mejorar la atención a la ciudadanía, tener mayor coordinación entre las entidades públicas y fortalecer el sistema de seguridad institucional.

En las instalaciones se ubicarán los ministerios e instituciones dedicadas a un área específica y que sean complementarias entre sí. Por ejemplo, en San Bartolo, donde actualmente está el cuartel militar Eplicachima, estará  la plataforma política: Presidencia, Cancillería, Ministerio del Interior y la Secretaría de la Administración Pública, entre otras (ver infografía).

En cambio, el Palacio de Carondelet estará destinado a eventos protocolarios, como la visita de jefes de Estado, además funcionará un museo y una biblioteca.

Lugares más dignos y funcionales para trabajar

A cargo del proyecto está la Secretaría de Gestión Inmobiliaria del Sector Público (Inmobiliar), dirigido por Katia Torres, quien indicó que la construcción de las plataformas iniciará en 2013.

“Durante décadas no hubo la oportunidad o la iniciativa de organizar y agrupar a las instituciones públicas de acuerdo con sus actividades y funciones, pero el actual Gobierno está más organizado y camina a una correcta planificación en base al Plan Nacional del Buen Vivir”, agregó.

La funcionaria explicó que varias instituciones cambiarán de edificio y ubicación, pero finalmente todas las dependencias estarán en un espacio propio. Hasta el momento se estima que el proyecto costará 470 millones de dólares.

Según Torres, los ciudadanos saldrán beneficiados porque “se mejorará la prestación del servicio y habrá lugares más dignos que faciliten la organización del trabajo” de los funcionarios públicos.

Un estudio preliminar realizado entre Inmobiliar y el Municipio de Quito determinó los sitios en que se ubicarán estas plataformas, “respetando el ordenamiento territorial, las centralidades y las necesidades” de la ciudad, reiteró la directora.

Hasta el momento la Secretaría ha realizado estudios de factibilidad, coordinación con otras instituciones del Estado, planificación de las seis plataformas y las fuentes de financiamiento. El propósito, reiteró Torres, es recuperar los predios públicos que hay en varios lugares de la ciudad, construir edificios de vanguardia y optimizar el uso del espacio público, con calidad y calidez.

Adriana Herrera, directora técnica de la Secretaría, indicó que aún no existe un modelo arquitectónico definitivo, porque será elegido mediante un concurso nacional posterior, hay estándares generales que deberán cumplir las  edificaciones: uso apropiado del espacio, accesibilidad, estudios de impacto ambiental y de tráfico, y ambientes amigables y “verdes”.

Ordenanza: en el Concejo solo hace falta el segundo debate

Para materializar el proyecto, el Concejo Metropolitano de Quito aprobó, en sesión ordinaria, las ordenanzas respectivas a inicios de febrero de este año.

El vicealcalde, Jorge Albán, explicó hace varios días que hay un acuerdo público entre el Municipio, el Gobierno Nacional, la Asamblea Nacional y el Biess para desarrollar estos proyectos arquitectónicos, que cambiarán el dinamismo de la ciudad.

La presidenta de la Comisión de Suelo y Ordenamiento Territorial, Elizabeth Cabezas, también informó  que se realizará un taller para analizar el espacio público de estas nuevas edificaciones, la afectación a la movilidad, los diferentes usos del suelo, la cantidad de parqueaderos que deben construirse en los sectores, entre otros temas.

Como parte de la plataforma de la Producción, en el sector La Pradera, están previstas reformas viales y la modificación del trazado de la calle San Salvador para mejorar la conexión entre la avenida Eloy Alfaro y la calle La Pradera.

Los concejales también indicaron que aún está por definirse el destino de los edificios que desocuparán estas entidades públicas, las alternativas de movilidad, cantidad de vehículos y parqueaderos, etc.

Esos elementos deberán ser discutidos y presentados hasta el segundo debate en el Concejo Metropolitano. También está pendiente otro taller y una reunión para discutir los proyectos, pues la transformación urbanística y organizativa se ejecutarán próximamente.