En este mes de enero 2017 en Nueva York Ecuador asume la Presidencia Pro Témpore del G77, este hecho no es un detalle menor para América Latina. El G77 es la institución internacional más antigua creada en 1964 en el marco de las Naciones Unidas, reunió en sus orígenes a 77 países del Sur o en vías de desarrollo, hoy día está integrado este grupo por 134 países.

En un escenario internacional, en donde los países desarrollados, léase, principalmente Europa y Estados Unidos, quieren seguir imponiendo su agenda particular en materia económica, política, diplomática, es necesario el fortalecimiento de todo el sistema multilateral a fin de garantizar una gobernanza global distinta a la actual.

Las últimas décadas un Norte cada vez más depredador y expoliador, ha venido imponiendo una agenda excluyente en el ámbito internacional por medio de las instituciones de ese poder imperial (OCDE, G20, DAVOS, etc); tratando incluso de secuestrar el carácter incluyente de una institución como las Naciones Unidas.

Desde el Sur se han hecho esfuerzos por volver a garantizar que el escenario internacional se gestione por la vía del multilateralismo, y principalmente por hacer escuchar “la voz de los sin voz”, los países empobrecidos del Sur. Esfuerzos como el de los BRICS a nivel global, o como de CELAC y la ALBA en nuestra América, son evidencia de esta apuesta por “otra gobernanza mundial es posible”.

En esta lucha por hacer del escenario internacional un espacio más igualitario y democrático, el G77 ha sido en todas estas décadas un pilar fundamental, tratando de que el Sur logre colocar en la agenda global las necesidades de la mayoría de ciudadanos y ciudadanas pobres de nuestro planeta.

Este enero 2017, cuando Ecuador asuma formalmente la Presidencia Pro Témpore del G77, nos encontraremos con una agenda global importantísima que obviamente Ecuador pondrá en movimiento:

- Lucha contra las Guaridas/Paraísos Fiscales: una necesidad urgente es eliminar el actual modelo de “jurisdicciones opacas” que el Norte ha creado para que sus transnacionales/multinacionales, dejen de pagar impuestos en nuestros países que es donde extraen sus ganancias.

- Por un Cuerpo Intergubernamental de Tributación Internacional: sin una nueva gobernanza global inclusiva y democrática en el tema fiscal, será imposible corregir un sistema global tributario quebrado y obsoleto.

- Por un Tratado Vinculante de las Naciones Unidas para las Empresas Transnacionales: iniciativa que viene promoviendo el gobierno ecuatoriano, y que desde las organizaciones sociales hemos hecho nuestra “los derechos de los pueblos, por encima de las atribuciones de los inversionistas”.

- Por un nuevo esquema de relación entre Inversionista/Estado: no puede seguir primando el interés privado de grupos de presión por encima de las necesidades de los Estados Nacionales.

- Por un nuevo orden económico global que garantice el derecho a la salud, a la educación, a la vida, de millones de personas que hoy son excluidas y sin derechos por un capitalismo depredador y explotador.

Desde los movimientos sociales de nuestra América, desde la sociedad civil global vemos no sólo con alegría, sino con esperanza que el Ecuador a lo largo del 2017 presida el G77, alegría y esperanza no sustentadas en un deseo, sino en una práctica concreta que hemos desarrollado con el gobierno del Presidente Rafael Correa con el que nos hemos venido encontrando en estos últimos años en diversidad de iniciativas regionales y globales, orientadas a garantizar un mundo más justo, equitativo, solidario, inclusivo y sostenible.