El número de muertos en los graves incendios que arrasan desde el lunes la costa al noreste de Atenas asciende a 74, mientras que los heridos son 127 (23 de ellos menores de edad). Sin embargo, la Protección Civil advierte que las víctimas mortales aumentarán.

Los medios europeos detallan que la mayoría de las víctimas fueron halladas en el área del puerto de Rafina, a  30 kilómetros de Atenas, y en Nea Makri, situada a 10 kilómetros más al norte.

Los reporteros locales están consternados por el impacto de la cobertura. Un periodista de la cadena Skai informó que en una casa se hallaron los cuerpos calcinados de familias. “Dos mujeres habían abrazado a sus hijos en la desesperación de protegerlos de las llamas”.

Tras las primeras novedades el Gobierno de Grecia pidió ayuda a la Unión Europea (UE) y también facilitó el primer paquete de ayuda inmediata de $ 24 millones procedentes del Programa de Inversión Pública, destinados a cubrir las necesidades de los damnificados. Pero a pesar de la ayuda internacional, del despliegue de centenares de bomberos y de numerosos medios terrestres y aéreos, el fuego  aún no se extingue. 

Ante la calamidad, el primer ministro, Alexis Tsipras,  declaró tres días de luto y prometió que “nadie se quedará sin ayuda y nada sin respuesta”. La cifra oficial de ayer fue de 1.000 viviendas totalmente calcinadas y miles de autos quemados o dañados.

Hasta el cierre de esta edición no se informó de turistas entre las víctimas. El ministro de Orden Público, Nikos Toskas, consideró que los incendios fueron provocados.

Las nubes de humo
Los incendios forestales más sangrientos de Grecia en más de una década enviaron motas de ceniza creando grandes nubes de humo sobre Atenas.

De acuerdo con la cadena Skai,  la gente huyó de las llamas, algunos corrieron a las playas, mientras que otros saltaron a los autos y lucharon contra caminos obstruidos. No obstante, las llamas arrasaron los bosques de pinos y algunos carros no pudieron escapar y se calcinaron en el camino.

Ayer trascendió el hallazgo de los cuerpos carbonizados de 26 personas abrazadas en la costa de Argyros, en Mati,  detalló el alcalde de Rafina, Evangelos Bournos. El presidente de la Cruz Roja griega, Nikos Economopoulos, declaró a Skai que los fallecidos  perdieron la vida cuando intentaban escapar hacia el mar.

Actualmente en Grecia las temperaturas llegan a los 40 grados. Además, en la región afectada hay vientos fuertes y “frentes paralelos múltiples” que dificultan la labor de los bomberos. (I)