Santiago.-

Los estudiantes marcharon este martes, una vez más, por el centro de Santiago, la capital chilena, en busca del “fortalecimiento de la educación pública” y exigiendo una “injerencia mayor” en el debate abierto por la reforma al sector.

Específicamente, unos 15.000 estudiantes chilenos protestaron contra la reforma educacional que promueve el Gobierno de la socialista Michelle Bachelet, la que consideran insuficiente y poco representativa.

La presidenta de la Federación de Estudiantes de Chile (Fech), Melissa Sepúlveda, aseguró que el movimiento estudiantil no aceptará un “maquillaje al modelo educacional”.

Agregó que esta vez “los estudiantes no vamos a cometer los mismos errores, no estamos dispuestos a sentarnos sin ninguna garantía para tratar de validar una reforma educacional que ya está en curso”.

El Gobierno envió al Congreso los primeros proyectos de ley orientados a reformar la educación chilena, que se centran en el fin del copago por parte de los padres en establecimientos que perciben subvención estatal; así como en la eliminación del lucro y de los procesos de selección en todos los colegios.

Los estudiantes no están conformes con estas iniciativas, entre otras razones, porque creen que se han diseñado a sus espaldas y que no rompen drásticamente con el modelo vigente.

“Quieren hacer una reforma en 100 días sin escuchar a nadie”, recalcó Naschla Aburman, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (Feuc).

“Mientras no se elimine el mercado de la educación no va a haber cambios reales”, acotó Lorenza Soto, portavoz de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces).  

Bachelet recogió en parte el reclamo de los estudiantes y aseguró que los próximos proyectos de ley que se envíen al Congreso considerarán los cambios que estos piden.

Se sumó a la marcha el Colegio de Profesores, que anunció “una batería de movilizaciones” durante este mes, que comenzará hoy con la entrega a todos los intendentes del país de las conclusiones de la jornada de reflexión, realizada por los docentes en mayo; a esto se suma un paro el próximo 25 de junio.

Jaime Gajardo, presidente del gremio de profesores, indicó que el proyecto de reforma “no aborda problemas de fondo y tiene aspectos que son contradictorios”. Así considera que el fin al lucro debe ir aparejado de un fortalecimiento de la educación pública y cambio de la forma de financiamiento.

También los dirigentes del sistema de transporte público urbano Transantiago hicieron un llamado a los choferes a marchar junto a los estudiantes.

El vocero de la coordinadora que agrupa a trabajadores de cinco empresas del Transantiago (Alsacia, Express, Vule, Subus y Red Bus), Luis Trejo, anunció que van a salir a las calles para que las autoridades los escuchen, “porque el Ministerio del Trabajo no ha realizado las fiscalizaciones para evitar despidos, injusticias y persecuciones entre los trabajadores del transporte público”.