Washington.- La Casa Blanca había advertido que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama,   rechazaría cualquier proyecto de los republicanos en la Cámara Baja que supusiera contrapartidas para la aprobación del aumento del techo de deuda.

Precisamente eso ocurrió luego de que los republicanos de la Cámara de Representantes de Estados Unidos anunciaran un proyecto de ley para evitar la suspensión de pagos, al que la Casa Blanca considera “inaceptable”.

El texto contemplaría la financiación temporal del Gobierno hasta el 15 de enero y elevaría el techo de la deuda federal hasta el 7 de febrero a cambio de retrasar uno de los impuestos de la ley sanitaria por dos años.

El proyecto elaborado por los republicanos, que será sometido a voto hoy, está inspirado en el que propuso la senadora republicana Susan Collins, la semana pasada, en la Cámara Alta, y que fue rechazado por los demócratas al entender que no debe haber concesiones adicionales, como la que se refiere a la legislación sanitaria, por el hecho de mantener la financiación de la administración.

Sin embargo, la Cámara aseguró que  la propuesta solo pretende “tranquilizar” a los miembros del Tea Party, a quienes acusa directamente de provocar el cierre del Gobierno el pasado 1 de octubre.

“Los demócratas y los republicanos han trabajado de forma conjunta, con esfuerzos bienintencionados para acabar con la crisis que ya ha afectado a las familias estadounidenses y a los empresarios”,  ha denunciado una portavoz de la Casa Blanca, Amy Brundage.

“A tan solo dos días (17 de octubre) de que se acabe la liquidez en Estados Unidos, es hora de que los republicanos en la Cámara de Representantes hagan lo mismo”, propuso.

No obstante, John Boehner, presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., controlada por los republicanos, aclaró que aún no se han tomado decisiones para poner fin a la paralización del Gobierno y elevar el límite de deuda del país, después de que se informara de que los republicanos preparaban su propio plan.