La actividad económica en Argentina registró en febrero pasado una caída del 4,8 % en comparación con el mismo mes de 2018, informaron este jueves 30 de abril fuentes oficiales.

Se trata de una menor caída que la registrada en enero, que fue del 5,7 % interanual.

El dato fue divulgado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) al presentar el Estimador Mensual de la Actividad Económica, que sirve como anticipo provisional para medir la variación del producto interno bruto (PIB).

Según las cifras oficiales, el índice que mide la actividad económica registró en febrero un leve ascenso del 0,2 % respecto a enero último, y ya en ese mes y en diciembre empezaron a registrarse pequeñas subidas intermensuales.

El sector del comercio mayorista, minorista y reparaciones fue el más afectado, con un descenso del 12,3 %, seguido por la intermediación financiera (-10,1 %), y la industria manufacturera del (-8,2 %).

Solo subió la actividad en la agricultura, ganadería, caza y silvicultura, un 5,9 %; en la enseñanza, un 1,2 %, y en los servicios sociales y la salud, un 0,5 %.

Con la caída interanual registrada en febrero, la actividad económica acumula 10 meses en retroceso en Argentina, después de que en todo 2018 el PIB de Argentina cayera un 2,5 %, un dato que contrasta con la crecida del 2,7 % en 2017.

Todo cambió cuando el país suramericano se vio particularmente afectado desde abril del año pasado por una fuerte inestabilidad financiera y las consecuencias de una dura sequía que golpeó al sector agropecuario, uno de los motores de la economía nacional.

Para 2019, el Gobierno de Mauricio Macri, espera que la economía se contraiga un 0,5 %, aunque pronósticos privados ya proyectaron que la caída del PIB podría llegar al 1,5 %. (I)