Los titulares del Ministerio de Relaciones Laborales y de la Superintendencia de Compañías garantizaron ayer el pago de las liquidaciones  a los  trabajadores de los casinos y salas de juego de azar  que serán cerrados.

“Los trabajadores no están solos, estamos trabajando para que no sean perjudicados y reciban sus liquidaciones”, afirmó el ministro de Relaciones Laborales, Richard Espinosa.

El secretario de Estado  dijo que al momento ningún casino ilegal debería estar funcionando en el país, toda vez que el viernes anterior fue publicado en el Registro Oficial el decreto 873 que prohíbe la existencia de las salas de juegos de azar en el Ecuador, una decisión que se ejecutará tras la aceptación popular de esta propuesta en un referendo celebrado el pasado 7 de mayo.

Se estima que   3.370 empleados de 94 casinos y salas de juego ilegales deberán ser liquidados inmediatamente por despido intempestivo. Posteriormente serán cancelados otros 2.190 de los casinos y bingos legales que funcionan en los hoteles 5 estrellas, los que tienen seis meses para dejar de operar.

En tanto, para finales de septiembre y octubre está programado realizar  ferias laborales en diversas ciudades, donde se espera que empresas oferten sus plazas de empleo para este grupo de desempleados.

Al momento un equipo técnico de la Superintendencia de Compañías realiza una evaluación para establecer la capacidad de pago  de los propietarios de los establecimientos.  Aunque todos  estos negocios están en la obligación de cerrar y liquidar a sus empleados, el estudio se lo hace para acelerar el proceso, precisó la titular de la entidad, Suad Manssur.    

La Superintendenta mencionó que las empresas que quieran dedicarse a otra actividad pueden cambiar de razón social, esto sin perjuicio de cumplir con la respectiva indemnización de los actuales empleados.

En tanto, el Ministerio del Interior en coordinación con las intendencias de Policías del país realizan operativos para controlar que estos locales no estén en funcionamiento.

Durante el fin de semana  unas 2.000 máquinas tragamonedas fueron incautadas en casinos ilegales  que fueron cerrados.