La extradición es el procedimiento mediante el cual las autoridades de un Estado entregan una persona a otro en el que lo reclaman para que pueda ser enjuiciado penalmente en ese territorio o para que cumpla en él una condena ya impuesta.

Esto sería obligatorio si el requerido es un delincuente extranjero y sólo si existe algún tratado internacional con el Estado que lo solicita o una Convención Internacional sobre extradición que ambas naciones hubieren firmado. Si no hay tratado, se puede acordar la extradición, pero no es obligatoria.

Dentro de las leyes diplomáticas internacionales, existe una clasificación para el tipo de extradición que se requiere. La activa, que es el acto de petición del país solicitante al país donde se encuentra el individuo; y la pasiva, donde la extradición recae en el Estado captor o poseedor de la persona requerida y la extradición de los nacionales. Esta última es mantenida solo por México, Reino Unido, EE.UU, Argentina, República Dominicana, Uruguay y Colombia.

Según el jurista Pedro Javier Granja, el asilo ya existía en la Edad Media, pero aparece por primera vez en el mundo jurídico el 19 de febrero de 1791 con el Decreto de la Convención Francesa como consecuencia de la Revolución Francesa y el reconocimiento de los derechos del hombre.

Ahí se asentaron las bases del Estado republicano que puso en  el centro de discusión los derechos del hombre moderno. Aún así, Granja explica que ya el Imperio Romano tenía una práctica similar de la extradición pero distorsionada, donde los romanos pedían la entrega de ciertos criminales, sea ciudadano romano o extranjero, a otros pueblos. Esta exigencia iba acompañada de una especie de declaratoria de guerra por considerar que la no entrega significaba protección al delincuente y complicidad con el ultraje.

"El pretexto, carente de toda prueba de que Assange está implicado en un estupro en Suecia, es sencillamente inaceptable. Lo que están buscando es condenarlo a muerte y si no es posible por la presión internacional, al menos planean encerrarlo de por vida", opina el jurista. Por eso considera a EE.UU y Reino Unido como seguidores de la antigua escuela romana.

En caso de delitos políticos no se concede la extradición porque estos dejan de serlo al atravesar la frontera. Incluso en esta categoría, existen los delitos políticos puros y los relativos. El primero se refiere a los que atacan la organización interna y al gobierno de un Estado, mientras el segundo se refiere a infracciones que estén relacionadas con un delito común o que tienen como inspiración, un motivo político.

Julian Assange al haber filtrado y publicado cables diplomáticos que involucraban al Gobierno norteamericano en el portal de Wikileaks, EE.UU o los países afectados podría ser procesado por cargos de ese tipo, pero no lograrían extraditarlo. Actualmente Assange es acusado por presuntos delitos sexuales en Suecia.