El volcán Tungurahua continúa su proceso eruptivo con un nivel similar al de los dos días anteriores, con emisión de columnas de ceniza, fuertes bramidos y un leve descenso en el tremor sísmico.
Según el Instituto Geofísico ecuatoriano, la noche del pasado martes se produjeron lluvias moderadas que originaron pequeños flujos de aguas lodosas en los sectores y quebradas aledaños y ayer se recibieron reportes de caída de ceniza leve en las ciudades de Baños y Río Verde.
Con respecto a la actividad sísmica la señal de tremor de emisión se mantiene (eventos producidos por la vibración del edificio volcánico debido a la expulsión y movilización de material magmático), pero muestra un leve descenso respecto a los días anteriores.
Un total de 638 familias de las parroquias Bilbao, Puela y El Altar, todas de la provincia Chimborazo, que habitan en las faldas del volcán Tungurahua, recibieron ayuda humanitaria por parte de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR). Ubicado a 135 kilómetros de Quito, el coloso andino de 5.029 metros de altura obligó a las autoridades a declarar la alerta naranja por su reactivación.