Al cumplirse un año de la tragedia que enlutó a cientos de familias de Manabí y Esmeraldas, en las ceremonias del Domingo de Resurrección los curas que oficiaron la misa recordaron a los ecuatorianos que, después del terremoto, perdieron a algún familiar o amigo. 

Oswaldo Cazorta, religioso dominico, indicó que así como hubo sacerdotes que recordaron la fecha e hicieron énfasis en la necesidad de seguir apoyando a los "hermanos de Manabí y Esmeraldas", otros pasaron la fecha por alto porque "lamentablemente coincidió con el Domingo de Pascua, en que se conmemora la Resurección de Jesucristo al tercer día después de haber sido crucificado, según los evangelios canónicos.

En la iglesia del Sagrario, ubicada en la calle García Moreno, hubo algunos feligreses que recordaron la fecha y encendieron velas para recordar a las víctimas del terremoto de 7,8 grados que cobró la vida de 671 personas, el pasado 16 de abril de 2016.

Algunos religiosos aparte de oficiar la misa hicieron énfasis a los presentes en la necesidad de asumir compromisos con la gente que lo perdió todo en este desastre natural.

En el norte de Quito, en la iglesia de la parroquia La Dolorosa, también se recordó esta fecha que coincidió con la celebración del Domingo de Resurrección  o Vigilia Pascual.

Ramiro Andrade, creyente católico, comentó que aunque haya transcurrido un año del terremoto, no hay que olvidar que las familias más golpeadas por el desastre continúan necesitando la ayuda de los ecuatorianos. "No hay que esperar a escuchar el sermón del domingo para tomar conciencia de nuestro deber con el prójimo". (I)