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Entrevista / Cristina Fernández de Kirchner / expresidenta de Argentina

"Hoy el mundo tiene excedentes por todas partes"

"Hoy el mundo tiene excedentes por todas partes"
Foto: Instituto Patria.
25 de julio de 2016 - 00:00 - Agencia Nodal

La expresidenta de Argentina, Cristina Fernández, convocó a varios medios de comunicación internacionales a su casa en El Calafate, al sur de la Argentina. En el encuentro, además de Nodal, estaban la cadena Al Jazeera de Qatar, el diario La Jornada de México, la cadena Telesur con sede en Caracas, la agencia de noticias Reuters del Reino Unido y la agencia rusa Sputnik.

Durante 2 horas Cristina Fernández, vestida con pantalón, remera y una ruana que la envolvía, habló con soltura y distendida de geopolítica internacional y los cambios que se dan en la Argentina y la región como si aún estuviera en el poder.

Hace 7 meses usted dejó el poder y han pasado muchas cosas en el mundo, en la región y en la Argentina. Se ven fuerzas políticas contrarias al espíritu que usted dejó cuando terminaba su presidencia en diciembre del año pasado. ¿Qué análisis hace de lo que está pasando y cómo ve ese tiempo que ha pasado desde que dejó el poder?

En la Argentina lo veo como un retroceso muy importante porque los logros que se habían obtenido eran realmente formidables. Más allá de ese discurso de la ‘pesada herencia’, los números son objetivos: al 10 de diciembre del año pasado, la Argentina había alcanzado el menor nivel de endeudamiento externo en moneda extranjera de toda su historia. No de los últimos 10 o 20, de los últimos 200 años. Nunca habíamos tenido este nivel de desendeudamiento. Es curioso que el gobierno que logró este desendeudamiento, fue el que había recibido el país en 2003 con el default de deuda soberana más importante del mundo de $ 160 mil millones. Además, había 2 dígitos de desocupación, un 54% de pobreza, 46% de indigencia y los jubilados cobraban 200 pesos. Nosotros terminamos el 9 de diciembre de 2015 con el nivel de endeudamiento más bajo en toda la historia que le permite al actual gobierno y a los actuales gobiernos provinciales tomar deuda. Los trabajadores argentinos habían logrado el salario con mayor poder adquisitivo de toda la región comparado en dólares, no sólo en terminos nominales sino en términos de paridad del poder adquisitivo que es la otra manera en la que hay que medir el salario. Uno puedo tener un promedio de $ 450-$ 500 de salario, pero ¿cuántas cosas adquiero en mi país con esos $ 500? No solamente teníamos el salario más alto en dólares sino que teníamos el de mayor paridad adquisitiva y mayor poder de consumo, el de mayor poder adquisitivo de la gente en un mundo que a partir de la crisis del 2008 se había tornado sumamente difícil y complejo.

Porque todo este proceso se produce, además, en un mundo con la crisis que aún no se superó del 2008, cuando cae Lehman Brothers, y después van y rescatan los bancos que tienen más rescates que los piratas del siglo dieciocho. Y siguen rescatando bancos mientras la gente se sigue hundiendo. Hoy el mundo tiene excedentes en todas partes.  Todas las economías, cualquiera sea su grado de desarrollo, me refiero hasta las más altas de tecnología y tecnificación, hasta aquellas que producen bienes primarios, tienen un excedente en su producción porque ha bajado el consumo en todo el mundo. Esto es producto de la crisis que no se resuelve, producto de que sigue habiendo cada vez más desigualdad en la distribución de los ingresos que se extiende como una mancha de aceite en todo el planeta. Y yo no recuerdo en la Argentina que un gobierno luego de estar doce años y medio se despida, o lo vaya a despedir el pueblo, con una plaza como nunca habíamos tenido (...) Sí, veo retroceso evidentemente en las libertades.  No puedo dejar de mencionar el caso de Milagro Sala, presa política, y ahora también se han sumado otros militantes, otros dirigentes sociales, entre ellos también su esposo.  

Sí, hay un retroceso. Hubo tal vez una mala evaluación del gobierno entrante, en cuanto al resultado de su ‘negociación’ con los ‘Fondos Buitres’. Lograron ordenar al Congreso, casi haciendo fila y tomando distancia, para que votaran un acuerdo que yo creo que fue muy malo con los ‘Buitres’. Pensaron que iban a llover los dólares a partir de este acuerdo con los ‘Buitres’, pero las inversiones se rigen por otras cuestiones. Nosotros sufrimos un ataque feroz a nivel global financiero porque hoy hay 3 patas fundamentales en todo este proceso que vive el mundo y, particularmente, la región: está la pata mediática, un partido mediático, está el partido judicial y, por otro lado, un sector financiero que se expande como una mancha de aceite sobre el mundo y marca línea a estos otros sectores.

Nosotros  tuvimos un ataque en nuestra gestión por no querer llegar a pagar el 1.600% en dólares, lo que nos parecía que excedía cualquier concepto usurario para entrar directamente en un despojo (...) Creo que todo esto influye: el brexit, la situación global, la desintegración de los órganos regionales, el Mercosur muy debilitado, Unasur también o los Brics que se presentaban como una alternativa.  Esto nos revela como que pareciera que esa multipolaridad que era cada vez más creciente ha sufrido un menoscabo y tendemos nuevamente -no digo a un mundo unipolar- a algo que se le parece bastante. Esto no es bueno para nadie, ni siquiera para aquellos que aparecen como aparentes beneficiarios de ese resurgimiento de la unipolaridad. Así que es un momento difícil y el nuevo gobierno tuvo una evaluación yo creo que errónea de que iban a llover los dólares. Estaban muy entusiasmados porque habían aprobado el acuerdo con los ‘Buitres’ y todo se iba a solucionar. Y esto no me convierte a mí en alguien visionario, clarividente o inteligente, sino simplemente en una persona que estuvo sentada ocho años en el sillón de la Casa Rosada y que no estuve de prestada tampoco en ese sillón.  

El festejo de este último bicentenario de la independencia en 2016 fue muy frío en contraste con el calor que hubo en mayo de 2010 y parece haber un vaciamiento sistemático de la historia nacional. Este esfuerzo que se ha hecho para poner a la historia argentina en su lugar, el lugar de la Patria Grande que sintonizaba a su vez con Chávez y el pensamiento bolivariano en Venezuela y Rafael Correa en Ecuador hablando de la revolución liberal, y usted invocando o recordando a Belgrano… ¿Cuál es su inquietud con respecto al impacto que esto tiene en la conciencia política de los pueblos hoy, en este momento tan difícil que no sabemos si es un amanecer o un anochecer?

Para mí la historia siempre ha sido muy importante como significante, no como relato o cuentito de lo que nos pasó sino como comprensión, significación de lo que nos está pasando y de lo que nos puede pasar (...) Pero además también es una forma de saber por qué nos están pasando las cosas que nos pasan. La conmemoración del 25 de mayo de 2010 era muy importante para mí, porque el 25 de mayo de 1810 era propiedad de la historiografía liberal argentina (...) Y el primer centenario había sido celebrado bajo estado de sitio con fuerte represión, con la Infanta de España que había venido a visitarnos y que se paseó con su carroza por las calles en pleno estado de sitio, con hambre, con desocupación, con obreros presos.

Cuando Néstor Kirchner gana la presidencia empezamos a trabajar con la arquitecta Margarita Goodman y a discutir el Bicentenario. Era el año 2004 o 2005 y no sabíamos quién iba a ser el presidente del 2010.  Yo comencé a pensar que ese Bicentenario tenía que ser profundamente nacional, federal, popular, regional, de la integración latinoamericana. ¿A quien fue a libertar San Martín? A Chile, a Perú, y después se encontró con Bolívar. Durante el festejo del 25 de mayo de 2010 caminábamos en medio de la gente sin policías Piñeira, Lula, Lugo, Evo, Pepe Mujica, Rafael Correa, Chávez… Ay, Hugo, por dios, Hugo, mi querido amigo Hugo…  ¡Era increíble! Los presidentes salieron a la calle y se miraron y me miraron preguntando si no iba a pasar algo y yo les dije que no nos iba a pasar nada. La verdad, que no se registran muchos antecedentes de casi 10 presidentes caminando entre una multitud que superaba los 3 millones de personas. Pepe Mujica me decía “hay más gente acá que en todo Uruguay”. Fue muy emotivo.

Entonces, la historia tiene que ver porque yo creo que los problemas que hemos tenido han sido parte de una subordinación cultural. La colonización militar y política fue sustituida más tarde por una suerte de colonización cultural y nunca hubo una consolidación cultural de lo que los mismos movimientos populares promovían. La subordinación cultural tiene que ver con la historia, y por eso la historia es tan importante, no por una cuestión épica de hacerse el héroe, sino simplemente porque es importante -no por nada las principales potencias del mundo hacen de su historia películas. (I)

La mandataria posa junto con los corresponsales de Nodal, Al Jazeera de Qatar, La Jornada de México, Telesur, Reuters y la agencia rusa Sputnik. Foto: Estanislao Santos / Instituto PATRIA

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