Cuando Michael G. Moye y Ron Leavitt crearon la comedia ‘Married with children’ (‘Matrimonio con hijos’) hace un cuarto de siglo no imaginaron el impacto en Colombia, Chile, Argentina o España, al punto de adaptar la serie, pero con la jerga y costumbres propias de cada país.

Y ese éxito tiene como base el humor negro que le dieron sus creadores a los Bundy, un estereotipo de familia disfuncional estadounidense y de clase media, con carencias de moral.

De hecho, durante las 10 temporadas lo que menos intentó la serie fue difundir valores en la sociedad. Más bien era todo lo contrario y eso representó un éxito comercial para Moye, Leavitt y los directivos de FOX, la cadena en la que originalmente se transmitió el ‘sitcom’ desde 5 de abril de 1987 hasta el 9 de junio de 1997.

Durante la década del 90 en Ecuador se pudo ver a través de TC Mi Canal (entonces Telecentro).

Al (Ed O’Neill) era el patriarca de la deformada familia Bundy. Casado a la fuerza con Peg (Katy Segal), pues el padre de ella lo apuntaba con una escopeta por la espalda durante la ceremonia para que dijera “acepto”.

Él era el prototipo del muchacho popular y estrella del equipo de rugby en la secundaria, hasta que conoció a Peg, una entonces adolescente promiscua que tenía relaciones sexuales con los que más podía.

El problema fue cuando Al embarazó a Peg, sin haberlo planeado. El producto de ese mal cálculo fue Kelly (Christina Applegate), la rubia tonta, según el estereotipo de la cultura norteamericana.

Algunos episodios de la serie revelaron que Kelly era una niña inteligente hasta que su padre chocó el destartalado auto de la familia. Al igual que la madre, Kelly aprovecha sus atributos para conseguir lo que quiere.

Según Bud (David Faustino), el menor de la familia y único que aparentemente es inteligente, su hermana ha tenido sexo con media secundaria.

Al odia su trabajo como vendedor de zapatos en el que para su mala suerte casi todas sus clientas son gordas de las que él se burla. El hecho de casarse obligado justifica su amargura como jefe de familia, que de paso debe lidiar con una esposa que es compradora compulsiva y sedienta del sexo que él se rehúsa darle y que cuando accede apenas dura unos segundos.

Marcy D’Arcy (Amanda Bearse) es la vecina que Al odia. En las primeras temporadas estuvo casada con Steve Rhoades (David Garrison). Luego se casa con el remedo de ‘playboy’ que es Jefferson D’Arcy (Ted McGinley), quien además es vago.

Los comentarios ácidos que se lanzan uno al otro fueron la clave para la serie que tuvo su adaptación en Colombia con el nombre ‘Casados y con hijos’ o la versión argentina que estelarizaron Guillermo Francella, Florencia Peña y los hermanos Luisana y Darío Lopilato.