El cuerno de rinoceronte está formado por queratina, esta misma sustancia se encuentra en las uñas de los humanos. Las creencias de países como Vietnam o Tailandia apuntan a que estos cuernos tienen propiedades medicinales y hasta curativas.

Debido a esto la demanda aumenta y con ello la caza ilegal de esta especie salvaje, pero bondadosa, que solo ataca cuando se siente amenazada. Sudáfrica alberga la mayor cantidad de rinocerontes del mundo, se estima que existen unos 20.000 en estado silvestre, pero su convivencia está en peligro.

A mediados de la semana pasada, las autoridades mostraron estadísticas que alarmaron hasta el más optimista de los ecólogos: en 2014 se cazaron ilegalmente 1.215 rinocerontes, en todos los casos fueron sacrificados para obtener sus preciados cuernos. En el mercado negro estos pueden costar cerca de $ 65.000 el kilo.   

Edna Molewa, ministra sudafricana del Ambiente, dijo que la cifra de ejemplares cazados representa un alza de 21% en comparación con el año anterior.

La red Traffic, que rastrea el comercio de fauna silvestre, informó que la crisis de caza ilegal empeora a pesar del creciente apoyo a los esfuerzos para salvar a estos animales, incluso más peligros en el terreno.

La organización dice que la corrupción, conflictos institucionales y retrasos en juicios clave a presuntos cazadores han perjudicado la campaña de Sudáfrica para proteger a los rinocerontes.

Hace 10 años, la cifra de muertes de rinocerontes por caza furtiva era de 15 animales al año, pero este dato creció dramáticamente a partir de 2007.

De acuerdo a un estudio reciente, liderado por el Dr. Duan Biggs de la Universidad de Queensland, la demanda de cuernos podría ser satisfecha si se cortaran del animal aún con vida, una alternativa que dicen sería menos cruel.

Hay organizaciones y políticos de Sudáfrica que proponen legalizar la venta de cuernos de rinocerontes para de alguna manera frenar la caza ilegal.