Ecuador, 21 de Mayo de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Ayer se realizó una casa abierta sobre nutrición en el hospital universitario de guayaquil

El consumo de gaseosas bajó el 8% con el etiquetado de alimentos (Infografía)

El consumo de gaseosas bajó el 8% con el etiquetado de alimentos (Infografía)
25 de febrero de 2015 - 00:00 - Redacción Sociedad

Génesis Castro contó 10 publicidades de hamburguesas, pizzas, helados, gigantescos submarinos, jugos, gaseosas y alitas bañadas en salsa BBQ, mientras  veía su serie favorita el pasado fin de semana. “Es como si te invitaran de forma divertida a comer todo eso”, dice la joven de 15 años. En 2013 el Ministerio de Salud Pública (MSP) analizó 15.431 anuncios publicitarios de productos comestibles y bebidas no alcohólicas.

Acaparando la parrilla televisiva están los productos poco saludables, con un 76,3%, es decir exactamente el tipo de publicidad que Génesis notó. Basados en los datos del MSP, si se suman estos avisos de snacks y gaseosas, más los de comida rápida, la publicidad de alimentos poco saludables llega al 91,8% en Quito y al 85,4% en Guayaquil (ver infografía).

Ante tanta publicidad de alimentos altos en azúcar y grasas, ¿cómo no dejar de comprarlos y llevar una vida más saludable? Para el nutricionista Jorge García, en Ecuador hace falta incorporar en la publicidad de esos productos advertencias sobre lo que contienen y causan a largo plazo, así como vemos en los cigarrillos. “Cuando la población tenga conocimiento suficiente para saber y tener criterio, queda a su conciencia comerse una hamburguesa sabiendo que tiene más de 500 calorías”.

García rescata cómo Ecuador ha avanzado en políticas nutricionales, en especial por el reglamento de etiquetado de alimentos procesados, expedido hace más de 1 año. “El impacto de esta iniciativa se ve más en los niños que en los adultos. Es probable que con el tiempo se mejore la cultura de determinar qué producto se puede comprar o no”, agrega el especialista.

En una guía médica distribuida en centros de salud, el MSP aborda el impacto entre la publicidad no saludable y el patrón alimenticio. Destaca que, para enfrentar el impacto, se puede empezar por poner impuestos a los alimentos no saludables, prohibir o restringir esta publicidad en horarios infantiles y establecer regulaciones legales a los alimentos ricos en grasas saturadas, sal y azúcar.

Los primeros resultados

En una visita a EL TELÉGRAFO, la ministra de Salud, Carina Vance, aseguró que ya hay datos preliminares sobre el impacto del etiquetado. Entre noviembre de 2013 y 2014 el consumo de gaseosas disminuyó 8%, mientras que la compra de agua embotellada aumentó 15%.  

En un recorrido por 3 supermercados de Guayaquil este diario  constató cómo los compradores se detienen a leer el etiquetado antes de llevar los productos al carrito. Juana Quimí desistió de comprar una gaseosa de 2 litros cuando vio las alertas en rojo, indicando altos contenidos en azúcar. “En mi casa antes comprábamos 3 colas en la semana, pero ya no porque ahora sabemos lo que contienen”.

Carlos Barriga, de 60 años, en cambio dejó de consumir embutidos por el exceso de sal. “Son muy ricos, pero tuve que sacarlos de mi dieta”.

Para el deportólogo José Emilio Reinhart, el etiquetado de alimentos procesados permitirá que los niños, a futuro, cuando sean mamás o papás, estén más familiarizados y escojan alimentos nutritivos.

Considera que con el tiempo las industrias se verán obligadas a reformular sus productos si tienen un ítem alto en azúcar, porque los ciudadanos simplemente serán más conscientes sobre lo que ingieren.

El siguiente paso del etiquetado serían los impuestos a productos no saludables, iniciativa que ya existe en Perú y México. El nutricionista Jorge García estima que Ecuador no está muy lejos de esto, y que el proyecto de Código Orgánico de Salud, aún en socialización, podría incluir la normativa.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Social media