Desde este mes unas 40 familias de recicladores registradas en la Empresa Pública Municipal de Aseo (EMAC), recibirán cursos sobre alimentación y nutrición.

La idea es que tanto las personas que se dedican a este trabajo como sus allegados sepan qué tipo de productos pueden consumir y mezclar, para alcanzar una buena dieta y contar con un estado de salud óptimo.

Las capacitaciones se realizarán gracias a un convenio entre la EMAC y el Instituto Superior San Isidro. Este último se compromete a impartir la teoría y práctica en la preparación de los alimentos.

Las jornadas serán en las instalaciones de la institución educativa, ubicada en la avenida Solano y 12 de abril.

“Parte del acuerdo es darles una capacitación en la parte higiénico-sanitaria de los alimentos y en la nutricional para que las familias también tengan un mejor vivir, los niños estén bien de salud y que eso incluso les permita estudiar bien”, manifestó Sandra Elkhori, directora de la entidad de educación gastronómica.

Las clases serán impartidas en horarios rotativos por los alumnos del instituto bajo vigilancia de sus catedráticos, quienes cuentan con licenciaturas y masterados.

Andrea Arteaga, gerente de la EMAC, manifestó que la colaboración durará 2 años.

Expresó que los hijos de los recicladores mayores de 6 años se capacitarán en asuntos básicos de nutrición.

Los alumnos no invertirán dinero en la adquisición de los insumos para las prácticas ni para la inscripción en el curso.

Cada módulo de enseñanza durará aproximadamente 40 horas y tendrá temáticas como: nutrición, prácticas higiénicas y preparación de platos tradicionales de fechas conmemorativas como Navidad y carnaval.

Durante el tiempo que dura el convenio, otros recicladores —hay cerca de 400 en el cantón—, se integrarán cada 2 meses a los aprendizajes.

Los primeros 40 en asistir a los talleres fueron escogidos como reconocimiento a su constante participación en las reuniones que se desarrollan en la Empresa de Aseo los últimos martes de cada mes, informó Eugenio Palacios, técnico de reciclaje de la entidad.

“Ellos tienen que aprender cómo balancear su alimentación. Por ejemplo, no deben comer fideos con arroz porque allí estaríamos combinando 2 carbohidratos”, afirmó.

No es la primera vez, acotó, que se realizan eventos similares para este grupo de personas, pues en anteriores días finalizaron cursos de computación, panadería, pastelería y corte y confección.

“Incluso en esta semana se integrarán en programas de alfabetización 4 personas y a fin de mes se inscribirán al menos unas 35”, mencionó.

La EMAC intenta erradicar el analfabetismo en los recicladores máximo hasta enero de 2016. El objetivo, a decir de Arteaga, es que las personas que se dedican a estas actividades puedan crear microempresas solventes para su desarrollo y el de sus familias.