Decenas de personas, entre hombres y mujeres de todas las edades, llegaron hasta las carpas de las instituciones de Salud, ubicadas en el Paseo de la Merced, de Machala, para donar sangre.

Los voluntarios de Salud evaluaron, tomaron la presión, el peso y un examen rápido a los donantes para saber si estaban aptos o no. Esta campaña se realizó para ayudar a los pacientes de escasos recursos económicos que requieran una pinta de sangre.
Los machaleños motivados por los voluntarios que les indicaron la importancia de donar sangre, otros porque se sintieron con la responsabilidad de ayudar, y algunos porque se les presentó la oportunidad, aprovecharon para aportar con los pacientes que requieren de sangre.

Richard Calle, quien por primera vez donó su sangre, dijo que era una oportunidad para ayudar a las personas. “Uno nunca sabe cuándo va a necesitar sangre, quizá en un futuro pueda ser yo o algún familiar mío”, indicó el donante.

Él es una persona que, dijo, que no tiene vicios, no fuma, no bebe, se alimenta bien y aprovechó esta oportunidad de donar por el llamado que realizaron los voluntarios.
En el Hospital Teófilo Dávila de la ciudad, muchas personas necesitan sangre luego de las cirugías, traumatismos, sangrados gastrointestinales y partos, así como pacientes con cáncer y personas con trastornos genéticos y con enfermedad de células falciformes.
En esta oportunidad se recolectaron 78 pintas de sangre con el apoyo de la Cruz Roja, que permitirá que haya la disponibilidad, calidad y el acceso gratuito de sangre para los pacientes que la necesiten.

Para desarrollar el evento se instalaron varias carpas en las cuales miembros de la Cruz Roja trataban temas, repartieron gratuitamente manillas con la frase “Habla serio, sexualidad sin misterios” siendo parte de la campaña para reducir la tasa de embarazos adolescentes.

Mariuxi Mejía, directora Provincial de Salud de El Oro, recalcó que la campaña de donación voluntaria de sangre fue creada en el año 2010 cuando obtuvieron 80 unidades de sangre.

“Este evento es de mucha importancia porque permite elevar los límites de la cantidad de componentes que nos falta como país. Para el requerimiento normal de la población, es decir, en 2010 participó un 30% de la ciudadanía por cada 1.000 habitantes; en el año 2011 aumentó a 40% y actualmente la meta es llegar al 50% de donantes por cada 1.000 habitantes”, indicó la funcionaria de Salud.

Manifestó que la persona que dona sangre no repercute en el aumento o disminución del peso corporal, ni tampoco se contagia con alguna enfermedad.