Un choque entre un bus de la cooperativa Calderón y una volqueta que trasladaba material pétreo, ocurrido ayer  en el redondel de la vía Machala –Pasaje, dejó como saldo un ciudadano muerto y 17  personas heridas.  

Julio César Quiñónez Ortiz, de 72 años, quien trabajaba en las unidades de trasporte urbano como vendedor de jugos de coco, falleció en el percance.

El hecho se dio a las 11:00 cuando la volqueta de placas AGB-700 se fue contra la parte frontal derecha del bus, llevando la peor parte el comerciante de refrescos, quien quedó atrapado entre los hierros retorcidos.

Según testigos, el carro de pasajeros circulaba sin problemas por el redondel, pero fue impactado por el vehículo pesado.

El conductor del bus no pudo evitar la colisión en la parte frontal de la unidad, que prácticamente quedó inservible.  

Al sitio llegaron bomberos de Pasaje y de Machala gracias a la llamada de un testigo al Ecu-911.

Personal de  organismos de socorro  atendió a los ciudadanos heridos.  
El colectivo de disco 17 y placas OAH-116 trasladaba a una veintena de personas que se dirigían hasta Pasaje.

Los lesionados fueron llevados a casas de salud de este cantón y de la capital orense. 

De acuerdo con versiones de pasajeros que solo resultaron con golpes leves,  la víctima subió en el redondel de la “Y” de El Cambio a vender agua y jugo de coco como lo hacía todos los días.

Los comerciantes  ambulantes de bebidas y alimentos de este sector se bajan en las inmediaciones del redondel de Bella India.

Sin embargo, el chofer del bus no paró en el sitio, llevándose hasta Pasaje a Quiñónez, quien se encontraba en la puerta del carro.

Asimismo, 15 pasajeros, el chofer y el oficial del bus, quedaron heridos, entre ellos una señora que fue trasladada desde el hospital de Pasaje a Machala, ya que su estado era muy crítico. El acompañante del conductor también tuvo que ser llevado a otra casa de salud de la capital orense, ya que presentaba politraumatismos y tenía rotas sus extremidades inferiores.

Consternación en familiares

Luis Carlos Quiñónez, hijo del fallecido, muy consternado acudió al sitio del accidente, donde solo pudo constatar la muerte de su progenitor.

“Mi padre llevaba más de 30 años vendiendo jugos en los buses y nunca  pasó una desgracia así. Yo también trabajo en lo mismo, pero justo hoy (ayer) no salí a laborar”, dijo Quiñónez, mientras esperaba que rescataran el cuerpo de su familiar. Las personas con politraumatismos y fracturas fueron trasladadas al hospital de Machala y clínicas privadas.

El chofer de la volqueta huyó del lugar y dejó  abandonado al pesado vehículo, que no presentó ningún daño.

Entre las 17 personas que viajaban  había cuatro profesores del colegio Ochoa León, de Pasaje.

Familiares del oficial del bus manifestaron que lo trasladarían a Cuenca, ya que su situación era crítica. Hasta el cierre de esta edición se desconocía el estado de salud de este último, así como de la mujer que fue llevada a Pasaje.