Puerto López.-

Para Pía Rojas, llenarse de lodo no es nada común. A sus 26 años, es la primera vez que lo hace. Nunca había estado en Manabí, por lo que todo lo que ofrece esta provincia es nuevo para ella; una de estas cosas es la laguna de azufre con la que cuenta la comuna ancestral Agua Blanca, perteneciente al Parque Nacional Machalilla.

Agua Blanca no solo ofrece este baño, que es promocionado como rejuvenecedor, sino que también cuenta con una riqueza histórica, ya que en el sitio se pueden encontrar vestigios de la cultura Manteña. Hay guías que explican datos sobre el comercio precolombino, de cómo la gente de la zona comerciaba con el spóndylus, producto estrella de la zona que llegaba hasta países como México al norte y Chile al sur.

Esta comuna está ubicada entre Puerto López y Los Frailes, playa que en diciembre del año pasado fue escogida como la más limpia del país. Caminar por su arena hace olvidar a más de uno de sus problemas, asevera Rojas, quien también visitó el lugar. “Todo es muy lindo aquí, de seguro volveré”, acota.

El complejo de Machalilla es una de las áreas protegidas más extensas de la costa ecuatoriana y comprende dos zonas: una terrestre (56.184 hectáreas) y una marina (14.430 millas náuticas). En el 2015, 206.360 personas visitaron los diferentes atractivos naturales.

Entre los meses de junio y octubre, las personas pueden disfrutar de la presencia de las ballenas jorobadas, especie que llega hasta las costas ecuatorianas para aparearse. Puerto López es la localidad que más visitantes registra para observar a los cetáceos. Un total de 41.544 personas realizaron avistamiento de ballenas el año pasado, cifra que las autoridades locales esperan sea superada.

Consuelo Carvajal, comerciante de Puerto López, contó que en las primeras semanas tras el terremoto no había mucho turismo, “pero con la llegada de los grandes mamíferos, todo se ha normalizado”.

Las tortugas marinas también aparecen a mediados de año en Machalilla. Este especie arriba a sus playas para anidar. Las eclosiones se pueden ver desde finales de noviembre, bajo la estricta vigilancia de los cuidaparques del sitio.

Vicente Zavala, coordinador Zonal 4 del MAE, destacó la labor del Centro de Rehabilitación de Fauna Marina, que en este año ha liberado 8 tortugas marinas a su hábitat natural y 17 se encuentran en recuperación. Mientras que 20 aves marinas ya han sido liberadas. “Esto representa para nosotros un logro porque es nuestro compromiso el aportar con nuestro ambiente y su biodiversidad, expresó”.

En el lugar también se puede disfrutar de la exquisita gastronomía manabita, hecha la mayoría sobre la base de plátano, maní y mariscos. Uno de los bocadillos más apetecidos en la zona son los corviches. (I)