Un albergue ofrece comida caliente y cuartos limpios a los necesitados
El albergue diocesano San Vicente de Paúl está ubicado en las calles Rocafuerte y Lalama, frente a la iglesia de la Medalla Milagrosa.
Allí, un grupo de 5 religiosas de la comunidad Hijas de la Caridad se encarga de atender las necesidades básicas de personas de bajos recursos económicos, trabajadores y enfermos.
En Ambato, esta labor solidaria ayuda a adultos mayores, personas con discapacidad y gente que necesita de un lugar para comer y dormir mientras busca trabajo.
Las hermanas se encargan de cocinar, barrer, dar catequesis y apoyar a los que tienen problemas de salud. Para esto, se levantan en la madrugada para coordinar el trabajo y la atención para unas 40 personas que llegan a pernoctar en el albergue que cuenta con 20 habitaciones con 3 camas cada una; 12 baños y un patio amplio. (I)