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El Telégrafo
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El espacio podrá faenar 20 reses y 40 chanchos por hora

Rumiñahui necesita $ 10 millones para su camal

El alcalde Héctor Jácome explica a funcionarios de la ESPE el proyecto del nuevo camal de Rumiñahui.
El alcalde Héctor Jácome explica a funcionarios de la ESPE el proyecto del nuevo camal de Rumiñahui.
Foto: Cortesía del Municipio de Rumiñahui
08 de julio de 2017 - 00:00 - Redacción País Adentro

Rumiñahui, Pichincha.-

El cantón Rumiñahui, ubicado al suroriente de Quito, no tiene un espacio para faenamiento de animales desde hace 5 años.

En 2012, el municipio pichinchano cerró técnicamente el antiguo camal por presentar problemas técnicos que no permitían su operación adecuada.

Está pendiente, desde entonces, el proyecto de construcción de un nuevo espacio para la muerte y desposte de animales.

En este período, la carne que  consume la población rumiñahuense proviene básicamente del Camal Metropolitano de Quito y, en menor medida, de otras zonas del Ecuador.

Al momento, según la Alcaldía, se tramita ante el Banco de Desarrollo del Ecuador (BdE) la autorización de un crédito que permita ejecutar la obra.

La inversión requerida en infraestructura y equipamiento asciende a $ 7,7 millones y la obra complementaria suma alrededor de $ 2,5 millones.

El proyecto se halla en la fase de revisión inicial, en la que debe demostrarse que es económicamente viable; es decir, la Municipalidad garantiza que el servicio será permanente y sostenible en el tiempo, a través del cobro de tasas o mejoras.

Previamente, se obtuvo del Ministerio de Agricultura, Acuacultura y Pesca (Magap), la Viabilidad Técnica para el proyecto y se logró la legalización de la propiedad del terreno.

De acuerdo con la Municipalidad rumiñahuense, el diseño, plan constructivo y funcionamiento del centro se ciñen al Sistema Único de Manejo Ambiental, en el que consta el Estudio de Impacto Ambiental.

Ambas instituciones (Municipio de Rumiñahui y Ministerio del Ambiente) efectuarán la socialización del plan de mitigación ambiental y las medidas que se adoptarán para minimizar los impactos.

El proyecto cuenta con 2 líneas para faenamiento de bovinos y porcinos, tecnología que asegurará el aprovechamiento de residuos y subproductos, tratamiento de aguas, inocuidad alimentaria, incinerador, es decir, con los requerimientos necesarios para que se convierta en un referente internacional con altos estándares de calidad.

En el nuevo camal está planificado que se faenarán 20 reses y 40 porcinos, por hora, en jornadas de 7 horas que se modificarán, de acuerdo con la demanda. (I)

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