El fiscal general del Estado, Galo Chiriboga, designará en los próximos días al equipo que cumplirá con la recepción de la versión del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en la embajada ecuatoriana en el Reino Unido, donde se encuentra asilado desde junio de 2012. 

La Fiscalía informó el jueves que comunicó a la Autoridad Central de Suecia (Ministerio de Justicia) que aceptó la solicitud de Asistencia Penal Internacional para que un fiscal ecuatoriano recepte la versión del australiano, en un caso en el que se presume su participación en un delito sancionado por la legislación sueca. 

"Esta colaboración se realiza en cumplimiento del Acuerdo de Intervención Judicial en Materia Penal entre Ecuador y Suecia firmado en diciembre de 2015", señala un comunicado del Ministerio Público. 

"De conformidad con el acuerdo bilateral y la práctica internacional en estos casos, será el órgano requerido (Fiscalía General del Estado del Ecuador) el que practique la diligencia por pedido del Ministerio de Justicia de Suecia", añade. 

El Ministerio de Relaciones Exteriores informó ayer que en las próximas semanas se acordará la fecha de celebración de las diligencias. Recalcó, además, que durante más de cuatro años, el Gobierno de Ecuador ha ofrecido cooperación para efectivizar el interrogatorio a Julian Assange, entre otras acciones de orden jurídico y político "para alcanzar una solución satisfactoria para todas las partes, poner fin a las innecesarias dilaciones en el proceso y garantizar la tutela judicial efectiva".

También la Cancillería reiteró la vigencia del asilo concedido al informático australiano y ratificó la protección del Estado ecuatoriano mientras concurran las circunstancias que motivaron la concesión de dicho asilo, "en particular el temor a sufrir persecución política".

El ministro de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, Guillaume Long, rechazó hace unos días presunciones respecto a que Ecuador se inmiscuye en la soberanía de otros Estados, a través del fundador WikiLeaks. En ese sentido aseguró que los criterios de Assange son personales.

Long insistió en entrevista con la Agencia de Noticias Andes que su gobierno no es responsable de las declaraciones del informático.

El ciberactivista se dio a conocer en el mundo en 2010, tras publicar miles de documentos secretos sobre conspiraciones, corrupción, crímenes y mentiras que incriminaron a varios gobiernos y en particular al de Washington como principal actor de ilegalidades. (I)