El exmarchista Jefferson Pérez, único deportista ecuatoriano que consiguió medallas olímpicas, entregó simbólicamente su legado a las nuevas generaciones de atletas nacionales, representadas por el también andarín David Hurtado.

El evento fue organizado por el Team Biosil, al que pertenece Hurtado y en el que estuvo Pérez en parte de su carrera deportiva.

La ceremonia se celebró en el parque La Carolina de Quito, junto al monumento a Jefferson Pérez.

El cuencano de 43 años, quien obtuvo la presea de oro en los 20 kilómetros marcha de los Juegos Olímpicos Atlanta 1996 y la de plata en los de Pekín 2008, pidió que se apoye incondicionalmente a los nuevos talentos locales.

“Tuve la suerte de recibir respaldo, no presión; hay una diferencia entre ambas cosas”. Aclaró que su legado no es únicamente para los marchistas de enorme proyección, como Hurtado o Glenda Morejón, sino para nadadores, ciclistas y todos quienes se comprometan a “romperse los músculos por el país”. Al ser consultado sobre la no validación de la Federación Ecuatoriana de Atletismo (FEA), al récord nacional que Hurtado impuso en los 5 kilómetros de la categoría sub-20, el año pasado, Pérez avaló públicamente la marca.

En octubre de 2017, el quiteño hizo 19 minutos y 29 centésimas (19m29s), durante la Race Walk Championships de Hauppauge en Nueva York, bajando los 19m49s54c que Pérez mantuvo como récord nacional desde el 23 de noviembre de 1990. La FEA no aprobó la marca porque en dicha lid no estuvieron competidores de cinco nacionalidades diferentes y no contó con pruebas separadas por género, tal como indica el reglamento.

El momento más importante del evento fue cuando Pérez dejó en manos de Hurtado una gorra blanca, similar a la que usó en las Olimpiadas de Atlanta.

Hurtado, que el 21 de abril cumplirá 19 años, expresó que su compromiso no es con ‘Jeff’ sino con todo Ecuador. Este domingo estará en Quito en el selectivo nacional para la Copa Sudamericana. (I)