Tras el primer chapuzón oficial de 2018, en el arranque de la Copa Mundo de Aguas Abiertas, la nadadora ecuatoriana Samantha Arévalo traslada su atención a los Juegos Suramericanos Cochabamba 2018, que se realizarán del 26 de mayo al 8 de junio.

La cuencana-moronense participa estos días en el Campeonato Nacional Italiano, que se lleva adelante en la localidad de Riccione. Las lides son en piscina.

Hoy competirá en los 400 metros libre, mañana en los 200 metros libre y el sábado en los 1.500 metros libre.

A inicios de febrero, en su última visita a Ecuador, la ecuatoriana anunció que si bien se especializa en lides de largo aliento, no ha dejado de lado las pruebas por estilos; de hecho, la mayor parte de su preparación la cumple en Roma, en la piscina del Centro Sportivo Olímpico del Ejército Italiano.

De talento dúctil, la amazónica cuenta como triunfos más recientes las medallas que se adjudicó en noviembre durante los Juegos Bolivarianos Santa Marta 2017 (Colombia): dos oros, en los 10 y 5 kilómetros de aguas abiertas, plata en el combinado individual de 400 metros, y  bronces en los 800 y 400 metros libre.

A ello se suma la presea de plata que consiguió en los 10 kilómetros del Campeonato Mundial de Aguas Abiertas que se celebró en Budapest (Hungría) en julio; un hecho sin precedentes en Ecuador.

Aquella conquista la hace pensar que, con trabajo y dedicación, todo es posible: incluso un galardón olímpico en Japón. Arévalo es una de los cuatro atletas que constan en la categoría Tokio 2020 del Plan de Alto Rendimiento de este año, la beca más alta que otorga el deporte nacional.

Dentro de la Copa Mundo, el 17 de marzo en Doha (Catar) en la primera fecha del circuito, que contó con 43 exponentes, “Samy” concluyó en el puesto 11 de los 10 kilómetros. La vencedora fue la holandesa Sharon van Rouwendaal, quien atravesó la meta tras cronometrar 2 horas, 02 minutos y 24 segundos (2h02m24s).

La deportista “tricolor” hizo 2h02m33s, es decir, 9 segundos después. Su afán es mejorar ese crono y llegar en plenitud de forma a las justas suramericanas.

Bajo la dirección técnica del entrenador italiano Fabrizio Antonelli, quien la prepara junto con las seleccionadas italianas, entre ellas Arianna Bridi y Rachele Bruni, la macabea depura su técnica y desea justificar su cartel de favorita en territorio boliviano.

El fin de semana anterior compitió en los 5 kilómetros  piscina del Abierto Italiano de Natación; logró ubicarse en los primeros lugares, pero sin ascenso al podio.

Lo fundamental, cree la nadadora, es seguir su plan de depuración técnica y aprender cada día, no únicamente del instructor, sino también de sus compañeras; cabe recordar que Rachele Bruni quedó vicecampeona de los 10 kilómetros de aguas abiertas en los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016.

Con 23 años, Samantha, quien tiene el respaldo publicitario de la fundación Crisfe, se apunta como una de las posibilidades para que Ecuador coseche su tercera presea olímpica; los dos únicos con los que cuenta son cosecha del marchista Jefferson Pérez en los 20 kilómetros: oro en Atlanta 1996 y plata en Pekín 2008. (I)