La coalición internacional contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) deberá seguir presionando, pese a las victorias militares en Irak y Siria, declaró ayer el jefe de la diplomacia estadounidense, Rex Tillerson, en una reunión en Kuwait.

“Cuando lanzamos nuestra operación -en 2014-, el Estado Islámico prosperaba. Hoy, el EI está perdiendo”, añadió el secretario de Estado en su discurso en el inicio de la reunión ministerial de los 74 países de la coalición internacional, dirigida por Estados Unidos.

El encuentro en Kuwait -donde se celebra una conferencia internacional para la reconstrucción de Irak- permitiría pasar a una nueva etapa ahora que, subrayó Tillerson, “cerca del 98% del territorio antes controlado por el Estado Islámico en Irak y Siria fue liberado”.

Pero las nuevas tensiones en Siria, especialmente la operación de Turquía en el noroeste, complican la estrategia estadounidense.

De acuerdo con Tillerson, la operación militar turca en el norte de Siria contra las fuerzas kurdas aliadas de Washington debilitó el combate contra el grupo yihadista EI ya que “fuerzas (kurdas) se dirigieron hacia (el enclave) Afrin”.

La ofensiva de Ankara, lanzada el 20 de enero, es en contra de las Unidades de Protección Popular (YPG), una milicia kurda de Siria que Ankara considera terrorista, pero que el occidente la ve como aleado.

En la guerra contra el grupo Estado Islámico, las YPG tuvieron un importante papel en la expulsión de los yihadistas de sus principales bastiones en Siria. (I)