Más de 800 detenidos, y cerca de un centenar de policías lesionados,  dejaron las manifestaciones estudiantiles que se produjeron   el jueves en  Chile para pedir   por el fortalecimiento de la educación pública.

“El total de capturados tras la marcha de ayer asciende a 874 personas a nivel nacional y hay más de 90 carabineros heridos”,  informó  el ministro vocero del gobierno, Andrés Chadwick.

Cientos de estudiantes intentaron durante   la jornada del jueves marchar por el centro de Santiago y en otras ciudades, pero fueron reprimidos por la Policía, que utilizó gases lacrimógenos y carros lanza-agua, después de  que el gobierno anunciara la prohibición de las manifestaciones.

Los jóvenes se quejaron de la represión que, a su juicio, recuerda el accionar de los gendarmes durante la dictadura militar del general Augusto Pinochet, quien gobernó Chile entre 1973 y 1990. “Me imagino que habrá sido así hace 30 años en Chile”, dijo Camila Vallejo, una de las principales dirigentes de los alumnos.

El presidente Sebastián Piñera hizo un llamado a los estudiantes para retomar el diálogo. “Los invito a dialogar y aportar para una educación de calidad. Es tiempo de construir y buscar acuerdos”, afirmó.