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Los obreros bolivianos radicalizan protestas y abortan los diálogos

Los obreros bolivianos radicalizan protestas y abortan los diálogos
14 de mayo de 2013 - 00:00

La Paz.- El intento fallido de tomar un aeropuerto y el recrudecimiento de cortes de ruta en Bolivia abortaron ayer una reunión entre el Gobierno y la Central Obrera  Boliviana (COB) que buscaba apaciguar el país, en donde desde hace ocho días se desarrolla una huelga general.

La intensificación del conflicto por parte de los sectores radicales contravino un pacto de la COB con el Gobierno de cesar los bloqueos de carreteras y cualquier tipo de protesta mientras dure la negociación, dijo el ministro de Economía, Luis Arce, que negociaba el pedido de una mejora en las rentas de jubilación, motivo de la huelga.

Cientos de mineros manifestaron desde El Alto hasta La Paz, un recorrido de 12 km en el que detonaron ensordecedores fulminantes de dinamita y colapsaron el tráfico, pero no provocaron mayores disturbios ni choques con la Policía. Otros cientos de maestros estatales asediaron también sin mayores resultados la plaza de Armas, sede de los poderes Ejecutivo y Legislativo, que amaneció con un fuerte resguardo policial.

Los viajes al interior desde el terminal de buses de La Paz eran irregulares por un corte en una ruta andina que conduce al interior. “Hemos estado trabajando (la noche del domingo al lunes) y los compañeros (de la COB) pidieron un cuarto intermedio y nos hemos enterado de cinco puntos de bloqueo que ya existen en el país, lo que rompe el acuerdo y el requisito para entablar las negociaciones”, añadió Arce.

La directiva de la COB había decidido establecer vigilias en reemplazo de las protestas y cortes de rutas, “y ellos claramente nos dijeron que significaba no marchas, no movilizaciones, no bloqueos y ese punto ha sido incumplido”, apuntó el secretario de Estado.

El líder de la COB, Juan Carlos Trujillo, se desplazó hacia un punto de bloqueo fuera de La Paz, donde pidió levantar las protestas porque “dialogamos para tener un acuerdo” con el Gobierno.

Los sectores radicalizados de la COB mantuvieron los cortes e intentaron tomar el control del pequeño aeropuerto Jorge Heinrich de Trinidad, que operan los vuelos domésticos del departamento de Beni, noreste del país.

Según reportaron medios locales desde Trinidad, la capital de Beni, el Gobierno desplegó militares en esa terminal aérea para evitar la toma. También hay carreteras suspendidas en la región andina de Potosí y la norteña Pando, indicó el ministro de Gobierno, Carlos Romero.

El diálogo había sido pactado a pesar de que el presidente Evo Morales afirmó que “no hay margen de negociación” en un tema que, manifestó, haría colapsar el sistema de pensiones a largo plazo.

La COB reclama que los trabajadores puedan cobrar una jubilación mensual con un valor equivalente al ciento por ciento de los últimos sueldos que recibían y no solo con un 70% como fija la ley de pensiones, pero el Gobierno argumenta que esa demanda no es viable.

En cambio, las autoridades han propuesto subir la renta mínima de jubilación de 531 a 574 dólares para los mineros y de 373 a 459 dólares para el resto de los sectores. El ministro de Economía indicó que no tienen fecha prevista para reiniciar las conversaciones, pero que el Gobierno agotará  los recursos para solucionar esta crisis.

MINA DE ESTAÑO REPORTA PÉRDIDAS POR LA HUELGA

La mayor mina de estaño de Bolivia, Huanuni, reportó ayer un déficit superior a los tres millones de dólares por una huelga de sus trabajadores en demanda de mejoras en las pensiones, informó el Gobierno.

De acuerdo con el ministro de Minería, Mario Virreira, las pérdidas por cada día de paro ascienden a medio millón de dólares, por lo que la empresa se encuentra en números rojos.

Los mineros se sumaron desde el pasado martes a una huelga indefinida de la Central Obrera Boliviana (COB) en demanda de una jubilación equivalente al ciento por ciento del salario, considerada desmedida por el Ejecutivo dado que pondría en riesgo los fondos destinados a programas sociales.

Según el funcionario, el paro agravó la situación crítica que se vive desde hace meses en la mina por los altos costos laborales y la baja en la cotización del metal.

El pasado enero Huanuni generó ingresos por 3,8 millones de dólares, con una cotización internacional de 10,67 dólares por libra fina de estaño. Sin embargo, en febrero el precio disminuyó  a 10,23 dólares y se registró un déficit de 1,1 millones de dólares. PL

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