La crisis política brasileña dio ayer un nuevo giro con el arresto  de Rodrigo Rocha Loures, un hombre de confianza del presidente Michel Temer, en vísperas del inicio de un juicio en el tribunal electoral que podría anular su mandato.

El exdiputado, filmado con una maleta repleta de dinero, fue detenido en Brasilia pocas horas después de perder su inmunidad parlamentaria. Este arresto fue autorizado por el juez Luiz Edson Fachin, responsable de las investigaciones de la trama corrupta en la estatal Petrobras en la Corte Suprema, que por las ramificaciones del caso inició una investigación contra Temer.

Según la Fiscalía, el mandatario podría haber incurrido en los delitos de corrupción pasiva, obstrucción a la justicia y asociación ilícita, lo cual se desprendería de conversaciones que tuvo con Joesley Batista, del grupo JBS, grabadas por el empresario y cuyos audios están en poder de la Corte Suprema.

Rocha Loures fue filmado en marzo cargando una maleta con 500.000 reales ($ 150.000) que, de acuerdo con delaciones de exejecutivos del gigante del grupo cárnico JBS, correspondían al pago de sobornos que constaban en los audios.

Batista declaró que pagaba comisiones ilegales a Temer a cambio de favores políticos a su grupo desde 2010 y que esa relación ilícita se ha mantenido desde que el gobernante asumió el poder, en mayo del año pasado, cuando comenzó el juicio político que acabó con la destitución de Dilma Rousseff.

Tras las confesiones de Batista y otros ejecutivos de JBS, las organizaciones sociales de Brasil, la oposición e incluso sectores del oficialismo exigen la renuncia de Temer, quien se niega a dimitir y ha dicho una y otra vez que probará su inocencia en los tribunales.

La declaración de Rocha puede perjudicar a Temer

Rodrigo Rocha Loures, hombre de confianza de Temer, ocupaba una banca de diputado como suplente de un ministro y perdió su fuero privilegiado esta semana, cuando el titular salió del Gobierno y recuperó su escaño.

Según analistas internacionales, Rocha puede perjudicar al debilitado mandatario si llega a un acuerdo con la justicia a cambio de una reducción de pena y habla sobre los sobornos.

Temer siempre defendió a su asesor y volvió a hacerlo en una entrevista publicada ayer por la revista Veja, en la que dijo que Rocha Loures pudo haber sido “víctima de una armadilla”.

El TSE iniciará juicio el martes

El episodio se produce pocos días antes de la apertura, el martes 6, de un juicio en la corte electoral por abuso de poder y financiación ilegal de la campaña de 2014, que podría costarle el cargo a Temer.

En esos comicios resultó reelecta la fórmula Dilma Roussef-Michel Temer. Pero Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) fue destituida dos años después por el Congreso, lo cual permitió el acceso al poder de su exaliado, a quien acusó de golpista.

El juicio debe durar tres días, pero podría alargarse semanas por probables pedidos de vista (suspensión) encaminados por los jueces para examinar el caso.

Si el Tribunal Superior Electoral de Brasil (TSE) anula la elección, definirá igualmente si Temer debe salir inmediatamente del poder o si puede seguir gobernando hasta agotar las instancias de apelación. De caer, el Congreso -plagado de sospechas de corrupción- deberá elegir al nuevo presidente en un plazo de 30 días. (I)