El mundo registró en 2015 un alarmante número de ejecuciones, al menos 1.634, el índice más elevado en 25 años, de acuerdo con un informe anual de Amnistía Internacional (AI) sobre pena de muerte.

El documento, presentado en Londres, concluyó que el 90% de las ejecuciones globales ocurrió en 3 países: Irán (977), Pakistán (320) y Arabia Saudita (158).

AI informó que 1.634 personas fueron ejecutadas el año pasado, un incremento de más del 50% comparado con 2014, y la cifra más elevada desde 1989, cuando ese organismo no gubernamental comenzó a publicar su reporte anual sobre pena de muerte.

La cifra total no incluye China, donde miles de personas habrían sido ejecutadas, pero la pena de muerte es tratada como “secreto de Estado”.

“El aumento de ejecuciones el año pasado es preocupante. Es la primera vez en 25 años que muchas personas fueron sometidas a la pena de muerte por sus Estados en distintas partes del mundo. En 2015, los gobiernos continuaron privando a las personas de sus vidas bajo la premisa falsa de que la pena de muerte es mejor para la seguridad nacional”, afirmó Salil Shetty, secretario general de AI.

“Irán, Pakistán y Arabia Saudita han utilizado la pena de muerte a niveles que no tenían precedentes, muchas veces tras juicios injustos. Esta matanza debe terminar”, agregó.

Shetty indicó, sin embargo, que por suerte los países que ejecutan a personas “pertenecen a una pequeña minoría, que cada vez está más aislada”.

La lista de los 5 países con mayor número de ejecuciones por pena de muerte el año pasado fueron China, Irán, Pakistán, Arabia Saudita y Estados Unidos, este último con 28 ejecuciones sumarias, el índice más bajo desde 1991. (I)

Seis naciones retomaron la pena de muerte

El informe anual de Amnistía Internacional confirmó que al menos 6 naciones que no habían ejecutado a personas en 2014, lo hicieron en 2015, incluida Chad, donde se puso en práctica la pena de muerte por primera vez en más de una década.

Bangladesh, India e Indonesia retomaron la pena de muerte el año pasado. En Indonesia, por ejemplo, 14 personas fueron ejecutadas por delitos de narcotráfico. 140 países abolieron la pena de muerte. (I)