Publicidad

Ecuador, 28 de Marzo de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Correa: “Que los injuriadores asuman un compromiso con la verdad y la ética profesional”

Correa: “Que los injuriadores asuman un compromiso con la verdad y la ética profesional”
28 de febrero de 2012 - 00:00

Desde las 09:00 hubo  un silencio casi  sepulcral en el Salón Amarillo del Palacio de Carondelet. Y es que todos querían conocer la anunciada decisión del presidente Rafael Correa sobre el juicio en contra de El Universo.

Una cita resume su postura:   “perdonar a los acusados concediéndoles la remisión de las condenas que merecidamente recibieron, incluyendo a la compañía El Universo”. Lo mismo para los autores del libro “ El gran hermano”, Christian Zurita y Juan Carlos Calderón.

Esas palabras rompieron el silencio. “¡No!”, gritaron en voz baja algunos simpatizantes de colectivos como   Plaza Grande o 30-S Nunca más,  pero también uno que otro ministro de Estado presente en la sala.

Con un tono muy serio, Correa empezó la lectura de una carta de 21 páginas. Las letras aparecieron en el teleprompter y la atención se centró sobre él.

Hizo un recorrido sobre todo el proceso judicial. Y reveló algo que nadie sabía: que entre la primera y segunda instancia hubo un acercamiento entre las partes.

Incluso dijo que El Universo envió un borrador de disculpas, pero los diálogos fracasaron, según el Mandatario, por la manipulación de un abogado.

Terminado el discurso, Correa se fundió en un abrazo con su  hermana   Pierina. Ella fue  el único familiar  que  lo acompañó.  Calificó   a la remisión como  un acto de generosidad y reconoció que  el juicio   le “quitó tiempo y  energía” a su hermano.

Afuera de Carondelet decenas de partidarios del régimen se concentraron en la Plaza Grande para escuchar la esperada intervención.

Adentro la formalidad se mantenía. Allí estaba el gabinete en pleno. El  vicepresidente Lenín Moreno aseguró  que la decisión  “da vuelta a la  página y la población debe dedicarse a otros temas más importantes que este tipo de confrontaciones”. 

Mientras el Jefe de Estado descansaba de su larga alocución, ministros como  Betty Tola,   José Serrano,   Javier Ponce, Doris Soliz y   Ximena Ponce lo esperaban en el salón de sesiones de la Presidencia para acompañarlo en la ceremonia de cambio de guardia (11:00).

Es que ese era el momento en que Correa se iba a encontrar con sus simpatizantes. “Gracias Presidente por ese perdón, que deja ver su noble corazón”, le gritó Luz Alegría Jiménez, una de las decenas de mujeres que se aglomeraron  en la  Plaza de la Independencia.

En el lugar la gente estaba eufórica. El público había seguido  en vivo las declaraciones del gobernante a través de   dos pantallas gigantes instaladas en los extremos de la plaza. Eso para los nacionales, porque el discurso  se tradujo, simultáneamente, al francés e inglés para que todo el mundo conozca de primera mano la decisión de un caso que puso a Ecuador en la palestra pública internacional.

También hubo unos lamentos. Fanny Palomeque, de 74 años, quien estuvo durante toda la audiencia de casación, el pasado el 15 de febrero,  no coincidió con la decisión del Primer Mandatario.  “Yo asistí a la audiencia y vi cómo mintieron, cómo lo atacaban”, afirmó con indignación.

Pero el perdón fue otorgado. A las 16:16, Alembert Vera, abogado del Presidente, lo oficializó en  la Corte Nacional de Justicia.

 

Carta de Correa sobre caso El Universo

Contenido externo patrocinado