La evaluación de los aproximadamente 7 mil servidores judiciales entró en la etapa decisiva una vez que se encuentra listo el reglamento y se definieron cuatro variables que determinarán la calificación individual.  

La Transitoria Quinta del Código Orgánico de la Función Judicial dispuso que el Consejo de la Judicatura de Transición (CJT) realice una evaluación de los servidores judiciales y fiscales dentro de los 180 días (seis meses) siguientes a su conformación, y el próximo  miércoles se cumplen ya tres meses desde que se inició el plazo.  

Al momento el CJT se encuentra empeñado en difundir y explicar a todos los judiciales del país el mecanismo de evaluación y sobre todo el reglamento y el instructivo, para lo cual se cumplen talleres. 

Según la vocal de la Judicatura, Tania Arias, para la evaluación se tomarán en cuenta cuatro variables: la productividad del funcionario; el expediente personal del evaluado; las pruebas y exámenes; y el grado de capacitación. 

La primera,  la productividad del funcionario, contará con un análisis cuantitativo y cualitativo de su producción. La segunda variable tiene que ver con el expediente personal del evaluado, aquí se tomará en cuenta la cantidad de sanciones que ha tenido y se verificará su hoja de vida y su actuación disciplinaria.

La tercera variable consiste en las pruebas, que serán de conocimiento, psicológica,  de orientación psicojurídica y psicométricas (sirven par verificar si los empleados son aptos para ocupar un cargo). Los exámenes verificarán las nociones técnicas afines al área que tienen los trabajadores judiciales.

En base a los resultados obtenidos se ubicará a los funcionarios en escalas alta, media y baja.
Respecto al cuarto punto que es la capacitación, se revisará la información de los  posgrados, especialidades y maestrías que tengan los servidores. También se considerarán las capacitaciones relacionadas con los cargos que han venido desempeñando, para lo que se les solicitó las copias de los certificados obtenidos y no  se tomarán en cuenta capacitaciones fuera de su área.   

Esta fase durará al menos tres meses, dijo Arias, al tiempo de señalar que se espera potenciar la capacidad de los funcionarios y que la información obtenida también sirva para que el CJT conozca las falencias de conocimiento de sus empleados, que serán reforzadas a través de la Escuela Judicial.     

La Judicatura de Transición coordina este proceso de evaluación con la Fiscalía y con la Defensoría Pública, debido a que los servidores de estas dependencias también se suman a la evaluación.   

Uno de los seis ejes que aplica el CJT para la reestructuración de la justicia ecuatoriana en un plazo de 18 meses, en cumplimiento con el mandato popular expresado en las urnas el pasado 7 de mayo, es el talento Humano y ahí está contemplada la evaluación del personal.  

Según el vocal del CJT,  Fernando Yávar, el establecimiento de un sistema técnico de remuneraciones, la promoción por méritos, una carrera judicial técnica, la implementación de una normativa para evaluar a los judiciales, la creación de al menos mil pequeñas judicaturas y  la capacitación integral son algunas de las metas del eje del Talento Humano.