Los trabajos de demolición del edificio la ‘licuadora’, ubicado en el centro de la ciudad, se encuentran en el 80%.

El Servicio de Gestión Inmobiliaria del Sector Público (Inmobiliar) informó que, hasta ayer, efectuaban trabajos entre los pisos 9 y 10.

Actualmente, las plantas que quedan de la edificación -construida en 1974 - están cubiertas por una malla protectora para impedir que el polvo y los restos del inmueble contaminen las zonas aledañas.

Arturo Mejía, director general del Servicio de Gestión Inmobiliaria del Sector Público, explicó que antes no se había cubierto toda la estructura de la ‘licuadora’, porque aún se trabajaba en la parte alta (el inmueble tenía 29 niveles). (IR AL ESPECIAL MULTIMEDIA: DEMOLICIÓN DEL ANTIGUO EDIFICIO DEL MAGAP)

El funcionario detalló que a medida que la demolición avanza hay la posibilidad de que caigan piedras desde la parte alta en la que se trabaja. “Estamos haciendo un ejercicio de precaución en el proceso de desmontaje”, argumentó el funcionario, quien aclaró que siempre se mantuvo la cubierta en los 2 últimos pisos que se derrumbaban.

El mes pasado, algunos moradores de la zona expresaron malestar y críticas por el ruido y el polvo que generan los trabajos nocturnos. Sin embargo, la entidad respondió ayer que no han recibido un reclamo oficial o de forma escrita por esos inconvenientes.

“Hay polvo, como en toda construcción, pero los niveles no son superiores a los que ocasiona una construcción normal. Hemos hecho mediciones de sonoridad y polvo, pero estamos por debajo de los niveles permitidos”, refutó Arturo Mejía.

Desde la parte exterior del cerco que rodea a la antes sede del Magap, se observa que primero son desmontados los pisos y, a la par, se deja la parte central o ducto de concreto. Los técnicos detallaron que la estructura (con forma de tubo) es usada de montacargas, es decir, para subir y bajar la maquinaria que se emplea en la demolición. Las herramientas que, también, se utilizan son grúas, minitaladros y retroexcavadoras.

Según la entidad, el material que queda del desmontaje será reutilizado. Por ello, junto a la ‘licuadora’ se observa un montículo de tierra y rocas que se emplearán para rellenar la parte subterránea y compactar el piso. La Empresa Pública Parques construirá allí, en el espacio que quede libre, una nueva área verde para la ciudad.

“El material restante será enviado al relleno Las Iguanas, hay una autorización del Municipio de Guayaquil”, aseguró el director general del Servicio de Gestión Inmobiliaria del Sector Público.

De acuerdo con el cronograma, apenas se derribe todo, en un plazo de 45 días se harán los rellenos que dejarán listos los suelos para que se construya el parque.

Asimismo, se recordó que hasta fines del próximo mes operará la gasolinera que funciona junto al antes edificio del Magap.

En noviembre del año pasado Tecnovía-Padko (compañía que desmonta el edificio) informó que hasta finales de 2013 concluiría la primera fase y la segunda comenzó este año.

La demolición se efectúa debido a que mediante una consultoría se confirmó que el inmueble estaba en mal estado y que la estructura no era funcional. A pesar de su altura, no cabían demasiadas personas en todos los pisos. “Resultaba más caro rehabilitarlo que demolerlo”, concluyó Inmobiliar.