Ayer concluyó la Semana del Rock con la participación 12 bandas en el concierto de cierre, realizado en el Parque de las Diversidades Factory, en el sector del Recreo, al sur de Quito.

Organizadores y músicos consideraron como una semana productiva en donde el rock tuvo su espacio, pese a que no existió una presencia masiva de asistentes en los 7 días de conciertos.

Diego Brito, organizador, dijo que fueron días intensos, tanto para la organización como para las bandas, aunque con altibajos.

El inicio del festival tuvo inconvenientes debido a la obtención de permisos de parte del Cuerpo de Bomberos y de la Secretaría de Gestión de Riesgos para que se puedan realizar los conciertos, por ello, tras la presentación de 2 bandas, se suspendió el espectáculo.

El resto de grupos que estaban previstos para el lunes lo pudieron hacer a lo largo de la semana para cumplir con lo programado.

Brito consideró que estos incidentes demuestran que todavía existen trabas para la organización de este tipo de eventos. Una vez superados los problemas, los conciertos se desarrollaron con normalidad, con más de 10 bandas en escena; sin embargo, los asistentes no superaron el centenar cada día.

Cierre emotivo

El viernes pasado el panorama cambió cuando la Orquesta Sinfónica Nacional y la Juvenil se juntaron con cuatro bandas de metal para ofrecer dos conciertos el mismo día en el Teatro Nacional de la Casa de la Cultura. Las dos funciones estuvieron llenas y, además, se dieron buenas críticas al evento, considerado como algo sin precedentes.

“Juntar a las orquestas y a 4 grupos no fue una tarea fácil, pero demostramos que se puede hacer eventos de altísimo nivel para la comunidad rockera”, dijo Brito.

Marlon Calero, bajista de Demolisis, afirmó que en esta ocasión los equipos de amplificación y todos los detalles técnicos fueron de altísimo nivel, aunque lamentó la escasa asistencia de personas ayer, cerca de las 11:00.

La tarde y noche del sábado se estima que asistieron 1.200 personas y ayer esperaban superar esa cifra, aunque antes del mediodía no había más de 100 jóvenes.

Antes de Demolisis tocó TCO y tras su presentación fue el turno para Malak, Cabal, Muerte Súbita, Fear, Avathar, Muscaria, Murder, Black Sun y el cierre con Mortal Decisión.

A excepción del concierto sinfónico, el resto tuvo un valor de $ 5 que, según los organizadores, era una donación sugerida que serviría para cubrir temas de logística; también 30% del total se destinará para la producción de un documental sobre la discoteca Factory, donde perdieron la vida 19 personas en 2008, mientras se realizaba un concierto de música gótica. (I)